martes, 13 de septiembre de 2011

SILO, A UN AÑO DE SU PARTIDA


La dimensión espiritual de Silo es inagotable y su muerte en Mendoza, de la cual, en estos días, se cumple un año, nos deja a los argentinos y a todos los que lo conocieron, una enseñanza cuyo horizonte, impredecible y vasto, es difícil de mensurar. Esta frase, dicha así en estos tiempos posmodernos tan intrincados y banales, parece la opinión de alguien que opina cualquier cosa sobre cualquier persona. Pero este hombre, Silo, no tenía nada que ver con lo mediático, ni era un personaje conocido de la coyuntura política, económica, literaria, de la farándula o del espectáculo.

En verdad, se trataba de un pensador, original e infrecuente, que buceaba en los abismos del corazón y la mente, configurando una tarea cuya exacta dimensión no ha sido todavía bien entendida. Con decenas de libros escritos, era también un hacedor, en el sentido que sus ideas se presentaban para ser configuradas en distintos grupos de estudios –verdaderos laboratorios existenciales– que muchos jóvenes y no tan jóvenes experimentaron y experimentan con entusiasmo y asombro, en diversos territorios y culturas.

Había estudiado a Ortega y Gasset, Edmund Husserl, Nietzsche, Sartre y Hegel. Por supuesto, conocía muy bien y entre muchos otros, a Marx, Darwin, C. G. Jung, Freud –a quien le objetaba la noción del inconsciente–, Wolfgang Köhler, Heidegger, Heisenberg, Kandinsky. Incansable, había indagado asimismo los planteos de espiritualidad en autores como Gurdjieff, Krishnamurti , Mircea Eliade y maestros del Budismo Zen. Todos ellos abonaron el terreno para la construcción de una magna obra, que buscó convertirse en una suerte de guía luminosa de los caminos internos.

La conciencia, para Silo, era un fenómeno abierto, una estructura de percepción, memoria y transformación de estímulos, cuyos vericuetos, incluyendo los más íntimos, reprimidos o alejados del mundo de lo racional, podían develarse a quien supiera encontrar, con paciencia, la llave para decodificar sus manifestaciones. La mente, en tanto, la presentaba como una suerte de ámbito mayor: el océano infinito e inspirador, dentro del cual la conciencia y el mundo desarrollaban su acción cotidiana y trascendental. Desde esta perspectiva, su original enseñanza liberadora tiene puntos de contacto con el budismo, aunque no desdeña aportes de los sufíes, de los pitagóricos, de la alquimia de los alejandrinos y neoalejandrinos o de la Philokalia de los monjes del Monte Athos.


Inquieto escrutador de la espiritualidad de las culturas precolombinas, en distintas oportunidades se refirió al mito mesoamericano del Quetzalcoatl, el hombre-serpiente convertido en dios, como también al gran Pachakuti, el renovador del estado Inca, quien humanizó el colectivo social de ese imperio, según se explica en el texto “El humanismo en las distintas culturas”, del intelectual ruso Semenov. Por otra parte, el monte Aconcagua, el techo de América, como majestuoso y simbólico protector andino –y de la madre naturaleza– de la localidad de Punta de Vacas, donde Silo comenzó su misión, era una constante referencia en su obra.

Heredero de Gandhi y Martin Luther King, fue el creador, sucesivamente, del Movimiento Humanista y de organismos como el Partido Humanista, la Comunidad para el Desarrollo Humano, Convergencia de las Culturas y otras agrupaciones. El mensaje de Silo es la síntesis de su doctrina dirigida hacia un fin: humanizar la Tierra, es decir, descubrir el sentido del hombre en el mundo.

Optimista profundo y de una curiosidad notable, en los últimos tiempos puso en práctica, como un verdadero Prometeo, lo que él llamó “talleres del fuego”: interesado en estudiar el salto de conciencia que iluminó a los homínidos y los convirtió en homo sapiens, ideó distintos experimentos para producir y controlar el fuego a partir de ámbitos primitivos, en elementales condiciones de origen. De esta manera quiso observar y entender el esfuerzo y el funcionamiento de la psiquis humana, que se puso en tal tarea hace 50 o 60 mil años atrás.

Muy poco antes de la muerte física de Silo, mi hija María Guillermina, un ser sensible y receptivo, me cuenta, conmocionada, que tuvo una intuición notable. Soñó que este, se encontraba en una reunión de amigos, ya flaco, debilitado y demacrado y de pronto se cayó al suelo; todos corrieron a auxiliarlo, pero entonces Silo los contuvo con un ademán, mientras les decía: “No, a mí no, cuiden la obra, cuiden la obra.” Extraordinaria premonición que me hizo acordar a la parte final del Zarathustra de Nietzsche, cuando éste, sentado en una piedra, inquieto y meditabundo, se preguntaba: “¿Cuál es el último pecado del hombre Superior?” Entonces, y de pronto, dice el poema, se le iluminó el semblante y se dijo: “La Autocompasión es mi pecado. ¿Acaso aspiro yo al lamento de mi autocompasión? No, se respondió con firmeza. Yo aspiro a mi Obra.”


En todas las culturas se manifestaron seres especiales que supieron ahondar, comprender la problemática de los tiempos más oscuros de la humanidad y plantear con claridad la huella de un futuro abierto y luminoso. Silo era uno de ellos. Su prédica por la paz comenzó cuando tenía 30 años, el 4 de mayo de 1969, en Punta de Vacas, a los pies del Aconcagua, con una arenga conocida como “La Curación del Sufrimiento”. Era el comienzo de la maravillosa década del ’70, con la renovación generacional, el Mayo de París y las ansias colectivas de transformar el mundo. Estuvo en Jujuy varias veces; incluso quiso decir una arenga en Yala, el 20 de Julio de 1969, pero no pudo, porque fue impedido por la intervención militar de entonces.

El desarrollo de sus ideas –combatidas por los regímenes militares, desde Onganía hasta el proceso militar de 1976– se extendió luego a todos los continentes. En el año 1993 recibió el doctorado Honoris Causa de la Academia de Ciencias de Rusia; poco tiempo antes, había sido designado “Maestro” por la Shanga budista de Sri Lanka, al sur de la India.

La última vez que se presentó en público fue el 11 de noviembre del 2009, en Alemania, donde disertó ante la Cumbre de los Premios Nobel de la Paz, cuando la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia -llevada adelante por la asociación “Mundo Sin Guerras” (nacida a partir de su inspiración)-, llegó a Berlín después de recorrer distintos continentes. Esa marcha, épica, comenzó en Nueva Zelanda, recorrió cinco continentes, y culminó su camino en Punta de Vacas, donde Silo, poco antes de morir, la recibió con los brazos abiertos; justo allí donde construyó uno de los tantos Parques de Reflexión que ahora se encuentran y se multiplican diseminados por el mundo.

domingo, 28 de agosto de 2011

1986 - LA MOVILIDAD DE IMAGENES PARA SALIR DE LA HIPNOSIS


Bien, hablemos de otra cosa, hablemos de la imagen. Hablemos de la movilidad de imagen. Hay gentes muy educadas atencionalmente. hay gentes muy estudiosas y con un perfil atencional muy claro, muy preciso, muy fino, hay mentalidades matemáticas en ese campo, precisas. Eso no me garantiza en absoluto la movilidad de imagen.
Pero, ¿qué están diciendo? ¿Están diciendo entonces que un gran pensador o un gran matemático o un gran, qué, puede ser, un hipnotizador y puede ser un sujeto sin flexibilidad de imagen? Sí, estamos diciendo eso (risas). ¡Ah, pero es un gran talento! Sí, sí, como no, dele un premio Nobel de paso, ¿y qué? (risas). Todo lo que usted quiera, pero no hay flexibilidad de imagen. Va a ser un gran adherente a las propuestas del sistema. Ese mismo, ese, sí, ese va a fabricar la bomba para tirársela en la cabeza a otros. Y ese mismo, el de la atención perfilada, ese irreversible, ese mismo, sí, claro que sí. Hay que entender estas cosas, que lo uno no lleva a lo otro. Hay un tipo de educación de la que se pueden sacar gentes que trabajan bien con la atención y que no son garantía de flexibilidad de imagen, ni de crítica, ni de autocrítica. Podrían ser perfectamente autómatas, podrían ser reemplazados absolutamente esos ejemplares de atención precisa, podrían ser perfectamente reemplazados por computadoras. Es más, creo que las computadoras, un poquito las de la quinta generación y las que vengan, creo que van a hacer mejores descubrimientos que ellos (risas). Seguramente ellos van a ser prescindibles o en todo caso van a tener que alimentar los circuitos, echarle carbón a las computadoras (risas), en fin, esas cosas para que funcionen. ¿Con qué funcionan las computadoras? Con carbón, vapor o algo de eso, bueno, podrán ser buenos alimentadores de computadoras, esos de la atención.
Así que para qué necesitamos gente si tenemos computadoras (risas). Si entendemos a la gente simplemente como una atención definida en la dirección en la que la hemos empujado.


Así que estamos hablando de otra función importante de la conciencia que es la imaginación, y no de la imaginación en general sino de la movilidad de la imagen. No se con qué imágenes trabajará cada cual, hay algunos que tienen un fuerte canal hacia la imagen visual, otros hacia la auditiva y así siguiendo. Hay proporciones distintas en los conjuntos humanos, un 5% se dice, trabaja fuertemente con imágenes auditivas, un 80% con imágenes visuales y así siguiendo. Bueno, sea cual fuere, necesitamos un fuerte manejo de la imagen. Una gran capacidad de conversión de la imagen. Y si ustedes tienen una gran facilidad para la conversión de imagen, movilidad de imagen, y no trabajan con atención, ustedes hacen asociación libre, delirancia (risas). Asociación libre, una cosa se encadena con otra sin dirección, sin dirección. Y sí, es un tipo muy imaginativo, fenómeno, lleno de flores. No estamos hablando de eso. No estamos hablando de imaginación libre, de libre asociación, estamos hablando del manejo de los mecanismos de la imagen. Del manejo de los mecanismos de la imagen y no de la imagen que se nos impone como pasa en el sueño. Si vamos al caso, el sueño es una delicia de movilidad de imagen. Hasta ese que fabrica la bomba, hasta ese sueña y sueña cada cosa que después..., ¡uuuyy!, ni se permite contar lo que ha soñado porque... (risas), estas cosas no son serias, son los restos animales que quedan en la sub-corteza (risas), el centro límbico está actuando.
Hubo un país, ¿pero cómo puede ser?, hace poco, hace poco, que en su cosa social demócrata extraordinaria decidió que había que modificar los planes de enseñanza, lo cual siempre está bien, hay que ver cómo. Estudiaron que había muchos niños en esa sociedad con terrores nocturnos, con líos, por los cuentos de viejas, cuentos de..., sobre todo en esos lugares donde los cuentos que se utilizan eran los de los hermanos Grimm, y bueno, que siempre hay brujas y..., muéstrame el dedito... (risas), es una cosa torturante para los niños. Ellos vieron que en los cuentos infantiles y demás había elementos que luego aparecían en muchos temores de la gente en la vida cotidiana. Y dijeron: “Acá hay un lío”, acá hay un lío con esos cuentos. Gente bien inspirada. Los sicólogos de esa sociedad social-demócrata, que quieren ayudar a la gente, a mí se me ocurre que no querrán perjudicar a la gente, ellos quieren, a su modo, todo el mundo quiere. Bueno, entonces decidieron modificar los planes de enseñanza. Y entonces, en los planes de enseñanza y en lo que explicaron a las familias y todo aquéllo, estaba presente esto de erradicar no los cuentos terroríficos y demás que, claro, ya creaban problemas, sino erradicar todo cuento infantil (risas). Son muy graciosos, es muy gracioso lo que les paso. Y entonces recomendaron a la familia y a todo el mundo, hicieron una suerte, no lo hicieron muy estruendoso porque eso ya suena a Fahrenheit, ¿no?, eso de andar quemando libros, eso no se hace; pero se guardaron los libros, hicieron una especie de caza de brujas. Pero con los libros de cuentos. Son tipos increíbles. Con los libro de cuentos, no sólo los libros terroríficos, sino los libros de cuentos en general. Porque preparaban al niño para un mundo que no existe; porque lo sacaban de la línea del eficientismo, de la línea de la modernización que querían introducir en sus estados, de la línea..., era gente que ya desde chiquitos, si le venimos con historias de que a un tipo le salen alas y luego se convierte en no se qué, y luego..., ¿ésto qué tiene que ver con el tornillo que usted tiene que apretar (risas), para que aumente la curva en un 0,28 de la producción, qué tiene que ver? Es un atentado contra el estado (risas). ¡Ah, suprimamos los libros infantiles! Cerca de 20 años les duró el rollo. Organizaron la educación infantil suprimiendo todo tipo de cuentos, tanto los terroríficos como los gratificantes, todo aquéllo. Las madres, muy disciplinaditas, tampoco, nada de cuentos, nada de historias, suprimieron esas maravillosas obras de arte de la ciencia-ficción que son los libros religiosos (risas), dioses que vienen llenos de truenos y rayos, tipos que van y suben cosas, ¡faf!, ¡squash! Síííííí, una novelita de ciencia-ficción una piojería al lado, imagínense ustedes, la Biblia, el maharata, el... ¡uuuyyy...!, ¡brillante!, ¡delirante! (risas).


Esa si que es ciencia ficción. La diferencia entre la ciencia-ficción y las grandes obras religiosas, hay muchas diferencia, pero una de ellas, ésto es una disgresión, pariente de la asociación libre (risas). Cuando alguien dice, voy a hacer una disgresión, está justificando la asociación libre (risas). ¿Y por qué no, y por qué no? Decíamos, en la disgresión, que una diferencia importante entre las grandes obras religiosas y la ciencia-ficción es que las grandes obras religiosas dan por sentado y no se andan con discusiones acerca de cómo funcionan sus dioses, sus cosas. Funcionan y funcionan y allá vamos. En cambio los de la ciencia-ficción se han cretinizado un poco y tienen que andar dando explicaciones de cómo funcionan (risas). Fíjense ustedes que si aparece un dios, por ejemplo y qué se yo, entonces siempre tiene que..., cómo puede ser que aparezca un dios, entonces tienen que explicar que hubo una computadora de otra dimensión que hizo una cosa y se equivocó, se equivocó alguien en la tarjeta y apareció, el otro lleno de bracitos, por ejemplo, ¿no?, ellos tienen que dar la explicación mecánica de cómo funcionan esas cosas. Y los otros, fenómeno, los de las grandes obras religiosas; no, ninguna explicación, apareció, hizo ésto y allá vamos (risas). Pero fíjense en esa características. Pero si ustedes quitan esa explicadera en donde a los dioses para que funcionen hay que decir cómo es la computadora y eso, si ustedes quitan esa cosa, se van a encontrar en la producción religiosa con cosas muy fenomenales desde el punto de vista, bue, de la movilidad de imagen.
Estos señores que estábamos contando, y bueno, apartaron todas esas fabulosas novelas de ciencia-ficción, también le desconfiaron a la ciencia-ficción, y eliminaron los cuentos infantiles. Y las madres, no se cómo sería, me hubiera gustado mucho escucharlo, pero, alguien hará un reporte de ésto, las madres en vez de cuentos a los niños no se qué les contarían, debe haber sido muy interesante. No se, las calorías que producen las grasas (risas). Debe haber sido algo lindísimo y absurdo (risas). 20 años estuvieron en ese rollo. Y claro, empezaron a aparecer los jóvenes de 20 años, sus ingenieros, sus..., y no se si es porque ya cambió el signo político y les fue mal a ellos políticamente, no se si fue por eso o por qué, pero dijeron: acá nadie está inventando nada, ésto es de lo último. Acá empezamos a ver una sociedad bien montadita, con sus tornillos y demás, pero todo viene de afuera, los que inventan cosas, los que generan, los que abren nuevos caminos y demás, tenemos que estar todo el día buscando cosas de afuera porque acá a nadie se le ocurre nada, no se les ocurría ni en la administración pública, ¡era un estado burocrático de lo último, cretino y cristalizado! Habla bien de ellos, de todos modos, el hecho de que se dieran cuenta. Y empezaron a abrir los cajones y empezaron a repartir todo bien... (risas). Y no se supo qué pasó, pero hubo gente inteligente, sin duda, que dijo, pero ésto es una grisura, una grisura total de la inteligencia, ¡ha sido un desastre!
Los señores pretendieron, está bien, pobres, ellos veían el lío que se producía con los terrores, los cuentos y las cosas, ¡está bien!, pero ellos pretendieron, sin advertir el problema técnico, ellos pretendieron cristalizar la imagen, fijarla en un canal, en una dirección, sin flexibilizarla, sin posibilidad de transformarla. ¡Fue una catástrofe!, desde el punto de vista de la creatividad, fue una catástrofe total que se reflejó en la producción, en el 0,28% que querían lograr (risas). Así que fail attention con esta cosa. No, no fueron franchutes. Fueron otros, pero bue... Un lío les pasó con ésto, un liazo.
Y bueno, para nosotros, gran importancia a la movilidad de imagen. Hay algunas técnicas que podemos desarrollar y que podemos hacer amenas estas técnicas, porque sino es un lío. Si alguien se va a poner a trabajar en estas cosas como si fuera un deber o algo así, estamos mal. Pero hay algunas técnicas que podemos hacer muy amenas, que pongan a la gente en contacto con esos mecanismos y que contribuyan a que la gente flexibilice la cosa. Eso nos va a servir, además, para todos aquéllos debilitados por la fijeza de la imagen del sistema, nos va a servir para desbloquearlos, nos va a servir para decirles: mirá cómo funciona la cosa y mirá lo que pasa en tu cabezota, y mirá como vienen los estímulos, los trenes de estímulos codificados, ¿eh?, en una dirección, como para que la gente pueda hacer sus trabajitos, ayudarse y fortificarse internamente. Surge una gran fuerza dentro de uno si uno abre las referencias y abre las comparaciones.

1986 - Que la gente caiga en cuenta de que sus problemas personales no se resuelven simplemente en lo personal


Está bien tener en cuenta los problemas biográficos, está bien tener en cuenta los problemas de situación que cada persona experimenta. Y cuando aparecen los nuestros como debilitados, está bien, cada uno tiene problemas, el otro se enferma, al otro le pasa no se qué, el otro somatiza, todos esos rollos. Y toda una estructura, todo un conjunto de gente parece estar envarada en un lío en un determinado momento. Sí, todo eso está bien. Pero eso, que cada uno lo va a interpretar como un problema personal, puede tener que ver con la situación, normalmente tiene que ver con una situación que de ninguna manera es individual. Que tiene que ver con el medio y con la situación que se está viviendo.
Hacer caer en cuenta de semejante cosa creo, es un gran avance. Que la gente caiga en cuenta de que sus problemas personales no se resuelven simplemente en lo personal, como si fuera una cosa terapéutica, sino que se resuelven en la medida en que se entienden en un conjunto, en un sistema en el que se vive, en un sistema de relación y de situación. Será un gran avance si podemos poner semejante cosa en marcha, esa toma de conciencia, sus problemas personales que parecen tan personales, no son tan personales.
Así como su yo que es tan yo, suyo, y depende de cosas de afuera, bue..., así también sus problemas personales son menos personales de lo que usted cree. En usted está ya, y usted los registra como personales. Hacer tomar conciencia de eso será de interés.

2010 - EL NUEVO HORIZONTE ESPIRITUAL

Y las nuevas generaciones y la nueva gente y demás, ¿cómo tiene la cabeza? ¿Cómo la pone a la cabeza? ¿Qué proyección hace con la cabeza? ¿Va a seguir pensando como se pensaba en otra época, en la organización de grupos humanos para conducir, esa cosa? No. Eso es una antigüedad, una aburridera y no funciona. Y no funciona. Tendrán que ser cosas con sentido. Y para que las cosas que se hagan tengan sentido, tendrá que haber un nuevo horizonte... ¿Cómo le llamaríamos? Un nuevo horizonte espiritual. Yo sé que la palabra espíritu crea problema, (risas). Claro, por supuesto, imagínense desde la Revolución francesa, hasta hoy... doscientos años machacando, bueno. No nos importa nada. Se necesita un nuevo horizonte espiritual. Y ese nuevo horizonte espiritual, creemos nosotros que está naciendo en el mundo. Mientras, simultáneamente, se van desintegrando todas las estructuras. Y comienzan los desbordes. Los desbordes, en forma. En lugares muy tranquilos, como por ejemplo era hasta hace poco, que sé yo, el Sudeste Asiático. Un lugar tranquilo, con mucho lío alrededor, ¿no? Que Vietnam, que Camboya, que Laos, que todo un despelote. Y ahí los Thai, los tailandeses, quietitos, no pasaba nada. Se normalizaron las situaciones alrededor y estalló el desborde ahí. Nos parece que se abre una etapa de desbordes en todos lados. Va a ser interesante esto. Y si no hay un nuevo horizonte, no nos vamos a poder ubicar en esta situación con cosas de otra época. Cosas de otra época que además nadie quiere. Nadie quiere. Vamos a ver cómo se hace y todo bien, y no hay drama. Y todo bien y no hay drama. No es ninguna tragedia, todo lo contrario. Pero los desbordes, vienen. Ya están. Y no van a servir las explicaciones cuando por ejemplo en los alrededores de Paris se incendien autos, no van a servir las explicaciones: "¡Ah, son descendientes de árabes!" No van a servir esas explicaciones. Siempre están esas explicaciones. Los desbordes vienen y no se van a deber a la agitación... Los agitadores comunistas, los agitadores trotskistas... Hay un malestar total, en todos los campos. Ese malestar se va a ir notando. Y eso de los agitadores... Y vamos para allá. Para las maravillas que hacen los que quieren ordenar todo. Amenazándote con bombas y con metralla en todos lados. Para lo bonito que han hecho las cosas hasta hoy. Para lo bien que han dejado al mundo.

Solamente tenemos un brindis que hacer y levantar las copas. Frente a toda la cosa asquerosa que hay en el mundo, frente a esta desintegración, a esta cosa centrífuga, en todo sentido, hay la creación de vida sintética. Ustedes dirán: "Ah bueno pero van a aprovechar para...". Aprovecharán lo que quieran, pero ése fenómeno, nunca antes se dio. Y es un fenómeno totalmente nuevo que va a traer mucha cola. Si frente a esta desintegración y a esta decadencia total empiezan a aparecer fenómenos de ese tipo, vamos a encontrarnos con la cola de los nuevos tiempos. Hay síntomas de nuevos tiempos, no sólo los desbordes, es un aspecto, hay otras cosas. Hay un nuevo horizonte. Claramente se está perfilando un nuevo horizonte. Así es que no nos va a interesar mucho ya, seguir criticando los desastres del mundo actual. Ya lo conocemos, ya sabemos adónde va. Estamos podridos de perder tiempo criticando los desastres del mundo actual. Ahora vamos... vamos a la vida artificial, (risas). No, pero merece un brindis. ¡Sí lo merece! Que lo van a manipular, que lo van a instrumentar, no cabe la menor duda, eso se ha hecho con todas las cosas. Pero de todos modos, se ha escapado de las manos de los controles de siempre. Se ha escapado. Ahora hay algunos que están enojadísimos con eso. "Hay que dejarse de jugar a Dios", dicen, (risas). A claro, los que tienen que jugar a Dios son ellos; que dicen lo que hay que hacer y lo que no hay que hacer. Pero si lo dicen los otros... Estamos jugando a Dios, y esto de estar jugando a dios me parece que es muy buena dirección, (risas). Muy buena. Muy buena dirección. Como decían nuestros queridos antepasados, ya muy lejanos, "Ni dios ni amo". Pero que haya un espíritu divino en la gente... ¡He! ¡Vamos! Un mínimo de poesía. No se puede ser tan bestia, (risas). ¡Es algo intolerable! Un mínimo de poesía. Y se está abriendo un horizonte. ¿Queremos llamarle un horizonte de poesía, en la práctica? Bueno, como quiera. ¿Una "nueva espiritualidad"? bueno, ¿por qué no? Pero se está abriendo otra frontera mental, ¡sin ninguna duda! Esto no va a terminar en esta caída, como una velita que se va apagando. Todo disminuyendo... No, ¡acá va a ver una! Bueno, bueno. Algo bueno. Con El Mensaje, saliendo de tema volviendo atrás, con El Mensaje, lo que nosotros proponemos en El Mensaje con los escritos que hay, las cosas que se plantean ahí, es eso, darle aire y darle fuego a esa nueva espiritualidad. Y las expresiones van a ser diversas, las que se manifiesten. Pero El Mensaje va a trabajar ahí. Nosotros lo vamos a hacer en salitas, la gente se va a adscribir a esas salitas y lo va a hacer crecer y va invitar a otros a trabajar en eso. Y punto. Y no nos va interesar hacer grandes movimientos, ni afiliar gente, ni un carajo. No nos va a interesar nada de eso. Si no simplemente poner la proa y abrir esa nueva dirección de la conciencia humana. Eso lo vamos a hacer. El Mensaje va para allá. Y saquémonos de la cabeza todas las aspiraciones excesivamente mundanas de andar manejando poderes y... Cambió el mundo, cambió el mundo, cambió el mundo. Para allá vamos. Claro. ¿Cómo no le voy a mirar la cara? Claro. ¿Por qué no? Cambio el mundo. Estamos en otro mundo. Como dicen los españoles ¡ostia!, (risas). Estamos en otro mundo. Claro. Estamos en otra. Está bueno, ¿no? Fuera de esta cosa...

2010 - Se está abriendo otra frontera mental


Como decían nuestros queridos antepasados, ya muy lejanos, "Ni dios ni amo". Pero que haya un espíritu divino en la gente... ¡He! ¡Vamos! Un mínimo de poesía. No se puede ser tan bestia, (risas). ¡Es algo intolerable! Un mínimo de poesía. Y se está abriendo un horizonte. ¿Queremos llamarle un horizonte de poesía, en la práctica? Bueno, como quiera. ¿Una "nueva espiritualidad"? bueno, ¿por qué no? Pero se está abriendo otra frontera mental, ¡sin ninguna duda!

Cuando una tabla “moral” sirve para controlar...


...en lugar de ayudar, para oprimir en lugar de liberar, debe ser rota.
Si se dice: “Ama a tu prójimo como a tí mismo por amor a Dios”, se presentan por lo menos dos dificultades. 1.- Debemos suponer que se puede amar a Dios y admitir que ese “amor” es humano, entonces la palabra no es adecuada; o bien amamos a Dios con un amor que no es humano en cuyo caso la palabra tampoco es adecuada y 2.- No se ama al prójimo sino indirectamente, por medio del amor a Dios. Doble problema: desde una palabra que no representa bien la relación con Dios, debemos traducirla a los sentimientos humanos.
Desde otras posiciones, se dicen cosas como éstas: “Se lucha por solidaridad de clase”, “se lucha por solidaridad con el ser humano”, “se lucha contra la injusticia para liberar al ser humano”. Aquí seguimos con la falta de fundamento: ¿por qué habría de luchar por solidaridad o para liberar a otros? Si la solidaridad es una necesidad, no es una cuestión que pueda elegir, en cuyo caso poco importa que lo haga o no lo haga ya que no depende de mi elección; si en cambio es una elección, ¿por qué habría de elegir esa opción?
Otros dicen cosas más extraordinarias, como por ejemplo: “en el amor al prójimo nos realizamos”, o bien: “el amor al prójimo sublima los instintos de muerte”. ¿Qué podríamos decir de ésto cuando la palabra “realizarse” no está clara si no se presenta el objetivo, cuando la palabra “instinto” y la palabra “sublimación” son metáforas de una Sicología mecanicista hoy ya, a todas luces, insuficiente?
Y no faltan los más brutales que predican: “Usted no puede obrar fuera de la Justicia establecida que está hecha para que todos nos protejamos mutuamente”. En este caso, no se puede reclamar desde esa “Justicia” ninguna actitud moral que la sobrepase.
En fin, quedan algunos que hablan de una Moral Natural zoológica, y aún otros que definiendo al ser humano como “animal racional” pretenden que la moral se derive del funcionamiento de la razón de dicho animal.
Para todos los casos anteriores, no cuadra bien la Regla de Oro. No podemos estar de acuerdo con ellos aún cuando nos digan que, con otras palabras, estamos hablando de lo mismo. Está claro que no estamos hablando de lo mismo.
¿Qué habrán sentido en los distintos pueblos y momentos históricos todos aquellos que hicieron de la Regla de Oro el principio moral por excelencia? Esta fórmula simple, de la que puede derivarse una moral completa, brota de la profundidad humana sencilla y sincera. A través de ella, nos develamos a nosotros mismos en los demás. La Regla de Oro no impone una conducta, ofrece un ideal y un modelo a seguir al par que nos permite avanzar en el conocimiento de nuestra propia vida. Tampoco la Regla de Oro puede convertirse en un nuevo instrumento de la moralina hipócrita, útil para medir el comportamiento de los otros. Cuando una tabla “moral” sirve para controlar en lugar de ayudar, para oprimir en lugar de liberar, debe ser rota. Más allá de toda tabla moral, más allá de los valores de “bien” y “mal” se alza el ser humano y su destino, siempre inacabado y siempre creciente.

2005 - Reparar doblemente los errores



Pregunta: ¿Cómo reparar uno doblemente un error?¿Por lo que uno siente que es correcto?.
Silo: Así es. De acuerdo a lo que uno crea correcto..., lo hace uno desde donde lo considera correcto y no hay ningún reglamento, lo que es bueno para ti...
Y ¿cómo es “doblemente”?, ¿4 cm. x 6 cm.? (risas). Lo que está al alcance de tus manos y un poco más de lo que puedes hacer, acordate que siempre hay no solo “daño emergente” sino también “lucro cesante”, (risas), mejor tener en cuenta eso, además, a futuro ya te andarás con más cuidado.
Que puedas solucionarle del mejor modo el problema al otro y no quedar con deudas. Cuanto mas claro, aumenta la posibilidad de que no hagas otro desastre. Ese sentido tiene, y es la conciencia moral la que entra en juego, para que no vuelvas a cometer el mismo error. ¡Pero tú no eres un criminal, un genocida...! No te preocupes tanto por tus errores, por lo que pasa contigo, no eres ningún monstruo, ni son tantísimas las cosas que le has hecho a otros... Mejor tratarte mas razonablemente y ver cómo vas a hacer para ir para adelante tú y otros. Cuantos menos desastres con otros, mejor, menos cosas a reparar. Que quede todo bien compensado, cuando está todo bien compensado, ¡buenas tardes! No es tanto el lío, mejor apuntar hacia adelante.
Para nosotros el primado del futuro es lo importante. La educación que tuvimos se basa en el pasado, no tiene gracia para nosotros.
(Aquí menciona una parte de sus palabras del 7 de mayo sobre las limitaciones a que uno está sometido): ¿cómo puede uno decidir sobre la dirección de su vidas si está sometido a tantos condicionamientos...? ¿Qué libertad de elección tiene uno? Si uno no puede ni pensar libremente... Sin embargo, algún rasgo de libertad habrá, siempre hay una brecha, hay algo de libertad que hay que explotar. Hacia qué vida estás apuntando.
¿Quién eres?
¿A dónde vas?
Son preguntas difíciles, pero hay que hacérselas.

2005 - ¿Podrías explicar cómo es aquello de que ojalá la señal sea traducida con bondad?


Silo: Ah, esas son cosas muy complicadas...
Hay gente que interpreta ciertas señales como si vinieran del mismo Dios. Puede ser también que lo estés traduciendo mal. No lo des todo por tan cierto y tan seguro, como si esta fuera la única verdad.
Uno tiene, de esos impulsos, no la esencia misma del impulso, sino la traducción, que puede ser más o menos errónea o correcta. Estas señales son traducciones. No te confíes tanto en esas certezas internas. No puedes hacer una cosa fanática de esa señal.
Como en los sueños, no vayas a creer que son un reflejo exacto de tus impulsos viscerales. Llegan al espacio como imágenes, pero no creas que son certezas esas imágenes.
Hay problemas de conciencia con todo eso.
Aquello tiene que ver con lo que un místico descubrió, él se preguntó cómo hacer para diferenciar cuando las señales provenían de dios y cuando del diablo. El se decía: “Supongamos que recibo impulsos de dios y del diablo, pero el diablo es tan vivaracho que me lo va a presentar cambiado” (podía confundirlo haciéndose pasar por dios...). Lo más interesante de este místico es que él descubrió un modo para discernir de dónde provenían esas señales, esos mensajes, y era -él lo decía con otras palabras- por el registro que los acompañaba. El que no venía de dios, dejaba un registro de violencia interna. Era indudable que eso no podía venir de dios... El notaba que si había que matar a otros para que reinara dios en la tierra, eso venía de otro lado, tenía un inconfundible sabor a violencia interna. Muy interesante aquel señor que descubrió eso.
Entonces lo de la señal, pues tú captas algo y tu conciencia lo traduce. Lo que se representa, entonces, no es la realidad, sino una traducción de una realidad. Y alguien podría decir que Dios le ordenó liquidar a no sé cuántos... que recibió ese mensaje... Por eso se ha dicho esto de que ojalá se hagan bien las cosas y se pueda traducir la señal con bondad.
Los fanatismos y todo aquello viene de traducir erróneamente.


Pregunta: He tenido algunos sueños con mucho brillo que se anticiparon a lo que luego sucedió...

Silo: Cuando sueño algo con mucho brillo, y se me da eso mismo, ocurren esas cosas una de cada diez, pero como las otras no tienen ese brillo... no puedo saber si se dio o no, hay errores y aciertos. Es como una ruletita, el tema de las probabilidades. Uno tiende a considerar los aciertos, pero entre pocos aciertos puede haber muchos errores. Por ejemplo en Rusia, durante la guerra, había muchas mujeres que soñaban que su hijo había muerto, y había muchos casos. ¿Eran verdaderos fenómenos de casos paranormales de anticipación del futuro? O había muchas mujeres que soñaban pero no recibían el telegrama... No basarte solo en algunos aciertos, tener más elementos.
Es un tema de probabilidades. Pero son tan importantes los aciertos, que uno tiende a creerlos paranormales. Hay que tener otros elementos antes de considerarlo paranormal.
Con la ceremonia de bienestar pasan muchas cosas, la gente es muy intuitiva... pero ¿a qué atribuirlo? Es difícil saber eso. No te va a resultar tan fácil manejarlo, sino esto sería un caos... si pudieras disponer de eso, ¡olvídate!
Será bueno que investiguen quien soy y hacia donde voy.
¿Soy el que creo que soy? ¿Soy el que dice la memoria que soy? ¿Qué soy y qué no?, ¿soy memoria? ¿soy percepción?, ¿yo soy yo, y ese yo es permanente?, ¿dónde está ese yo permanente que a veces es de un modo, a veces de otro?, ¿y cuándo duermes es el mismo yo?, ¿y cuando estás despierto?...
Vale la pena echar una miradita…

1989 - El futuro se acercará a la cotidianidad de la existencia


Si alguna vez tenía importancia el pasado, de donde eres, de que familia, etc., el tiempo que predominará a nivel de existencia cotidiana será el futuro. El futuro se acercará a la cotidianidad de la existencia. Mientras el hombre ha vivido "distraído" de la temporalidad de la existencia ha podido vivir con sentido, con falsos sentidos, pero se las ha podido arreglar. ¿Qué pasará si esa distracción, esa "des-pre-ocupación" deja de ser posible por el aceleramiento y la cercanía del futuro? Hay ya algunos síntomas de la primacía del futuro. Ya hay algunos que ensueñan en congelarse y volver en 20 años a ver como quedó todo. Es muy elemental, pero pequeños síntomas. Los de la vuelta al pasado son cada vez más bichos raros en la dinámica del proceso. El mundo que viene... - Yo veo con mis ojos. - ¿Con cuál, el suyo o el que estaba en el banco de ojos que le insertamos ayer... - Su hígado o el modelo 3xh de la Mitsubishi. - La pichulita nuclear de la Toyota que es mejor que la de la Sanyo... - Tengo un buen hijo porque lo programamos en el tercer núcleo del ácido desoxirribonucleico para que siempre diga "sí, papá"... Esto es la aceleración del Tempo histórico. Es lo que pasa por dentro. Es la historia vivida desde adentro. La cantidad de cambios que se experimentan en un mismo día es lo que se entiende por tempo histórico. No son las fechas del tiempo. Sino la cantidad de variaciones en esas fechas, provocadas por objetos culturales. ¿Qué pasará cuando un objeto cultural genere otro objeto cultural? Eso será peor que el "tempo histórico". Esto afectará críticamente la siquis cotidiana de la gente. Nada será como creen. Todo lo que creen en un año se demostrará que es falso. Los que hablan de la "realidad" en realidad no saben de qué hablan. No pueden entender a las nuevas generaciones y las entenderán cada vez menos. Necesitamos un elemento que permita dar referencias en esta aceleración. Dar referencias globales, existenciales. Que permita generar un sistema de relaciones para que uno de los nuestros pueda desarrollar un proceso humano. Un elemento, basado en la necesidad de referencia que se va a experimentar, especialmente en las sociedades más aceleradas.

1989 - No se trata de romper con el pasado, sino de reinterpretarlo, con la mirada puesta en el futuro


No se trata de romper con el pasado, sino de reinterpretarlo, con la mirada puesta en el futuro. Desde el hoy volver hacia atrás para ver la trayectoria de uno y proyectarla hacia delante, hacia el futuro con más fuerza.
Uno no puede modificar los hechos que ocurrieron pero sí puede, perfectamente, modificar y variar la óptica que tuvo de esos hechos. Puede aplicar distintas “lentes".
El objetivo del trabajo con la biografía es salir con un mayor abanico de posibilidades a futuro; de posibilidades y no de seguridades.
Las generaciones anteriores se movían en busca de seguridades a futuro, con modelos de conducta y una visión del mundo fijos; y a la generación actual le siguen influyendo estos valores y referencias. No son seguridades, lo único que tenemos son opciones, más aún en un mundo cambiante y veloz como éste.
Tendríamos que manejarnos con muchas imágenes. Por primera vez en la historia, los cambios son más veloces que la capacidad de adaptación. Pero es cierto que nos movemos con imágenes, valores, creencias de gente que ahora tienen 50 años, son valores que sirvieron en su tiempo pero que en esta época no son validos.


Ante la aceleración que se viene habrá que desarrollar la capacidad de adaptación. A lo largo de la historia ha habido especies que no se han adaptado (ejemplo: los dinosaurios) y han desaparecido y otras, en cambio, que sí se han adaptado. Pero dentro de esta adaptación existen dos posibilidades:
Una adaptación resignada: que busca seguridad. Son especies que se han adaptado para seguir igual, (ejemplo: cucarachas).
Adaptación creciente: es la que caracteriza al ser humano, es una adaptación que busca posibilidades, que no se resigna, que se rebela... El ser humano es una especie inestable.
Así es que ante la aceleración que se viene habrá que desarrollar la adaptación, pero de una forma creciente. Y será muy interesante todo el trabajo que se pueda hacer para ayudar a la gente a mover sus imágenes, a variar puntos de vista... a flexibilizar su cabeza.
Respecto a las posibilidades de éxito de nuestro proyecto, no hay seguridad en el resultado y tampoco importa, lo importante es: ¿cómo uno vive las cosas que hace?, ¿qué pasa con uno cuando está haciendo algo coherente?, en cualquier caso, merece la pena el intento...
Desde el sistema, se están dando respuestas que están provocando mayores catástrofes aún, son falsas salidas: La sicología oficial, (uno va a contar sus problemas, le invitan a que vuelva a contarlos y le cobran por ello); otros catarsean sus problemas y alguien los perdona; están los ocultistas, (solo ellos saben las respuestas); o la droga.

1989 - Hay quienes no quieren que las cosas cambien


Hay quienes no quieren que las cosas cambien, que nada se mueva, que el futuro no se abra. Llegan incluso a posponer esa dinámica de apertura de futuro “permitiéndola" sólo para la otra vida, proponiendo cielos y paraísos pero para después, para el mas allá, pero que aquí nada se mueva.

LA PRESENCIA DE LA FUERZA



VII. El día quinto. 1. Cuando estaba realmente despierto iba escalando de comprensión en comprensión. 2. Cuando estaba realmente despierto y me faltaba vigor para continuar en el ascenso podía extraer la Fuerza de mí mismo. Ella estaba en todo mi cuerpo. Toda la energía estaba hasta en las más pequeñas células de mi cuerpo. Esta energía circulaba y era más veloz e intensa que la sangre. 3. Descubrí que la energía se concentraba en los puntos de mi cuerpo cuando éstos actuaban y se ausentaba cuando en ellos no había acción. 4. Durante las enfermedades la energía faltaba o se acumulaba exactamente en los puntos afectados. Pero si lograba restablecer su pasaje normal muchas enfermedades empezaban a retroceder. Algunos pueblos conocieron esto y actuaron restableciendo la energía mediante diversos procedimientos hoy extraños a nosotros. Algunos pueblos conocieron esto y actuaron comunicando esa energía a otros. Entonces se produjeron “iluminaciones” de comprensión y hasta “milagros” físicos.
La Mirada Interna.

EL FUTURO, LA MUERTE Y LA TRASCENDENCIA



La mente humana no puede vivir sin futuro. Y si en el futuro está la muerte y la nada, la mente humana tiene problemas, no puede funcionar si su visión del futuro termina con la muerte, la situación que sufre el ser humano frente a la posibilidad de la muerte altera su conciencia, altera su conciencia y desacomoda su situación en el mundo. El ser humano no puede vivir con una conciencia equilibrada en la medida en que no resuelva que va a pasar en su futuro. ¿Se va a acabar todo con la muerte?, se va a acabar entonces el futuro, si tengo el futuro cerrado tengo problemas en mi conciencia y en el momento actual, ese es el punto, tengo problemas en el momento actual. Todavía no me muero, pero tengo problemas hoy aunque no me haya muerto, porque adelante está el corte del futuro, es muy curioso eso... cómo están jugando los tiempos en la conciencia.
Entonces mientras no resuelva que pasa en mi futuro voy a tener problemas. Yo puedo negarlo, puedo olvidarme del problema de la muerte, claro que puedo olvidarme, y por supuesto que las cosas que voy haciendo también las hago un poco como un olvido de la muerte, todo lo que hago lo hago en gran medida para olvidarme del problema de la muerte. No se por cuanto tiempo logro olvidarme del problema de la muerte porque hoy muere un ser querido, y eso es evidente, y mañana otro y pasado otro, y luego aquél que era compañero mío cuando éramos chicos, y cada día se hace más evidente el problema de la muerte a medida que avanzo en edad.
Las gentes muy joven, parece que ha olvidado totalmente el problema de la muerte, y no se trata de mortificar a la gente persiguiéndola con el problema de la muerte (risas), se trata todo lo contrario, se trata de provocar una apertura de tal manera que eso no sea problema, de eso se trata. Pero, ¿cómo no va ser problema la muerte?, bueno, depende como se ubique usted frente a eso, nosotros decimos que hay por lo menos cinco posturas frente al problema de la muerte y frente a las posibilidades de trascendencia, frente a la posibilidad de que la conciencia tenga un futuro.
Bueno hay gente que no cree absolutamente en la trascendencia y cierra la posibilidad de su futuro, está bien, es una posibilidad. Hay otros que piensan que el tema es interesante pero no los afecta mayormente y en realidad consideran que..., que puede ser o puede no ser. Hay otros que quisieran estar seguros de que luego de la muerte hay posibilidades, quisieran tener una fe y dicen: "ah, si yo tuviera fe, que interesante, como cambiaría mi vida", pero claro, no lo sienten.
Hay un cuarto tipo de persona que, simplemente tiene fe, no se hace mayores problemas, desde pequeña le han explicado, le han enseñado cosas... entonces dice: "bueno si yo cuando me muera me voy al cielo", o algo por el estilo, está bien. Y hay un quinto tipo de persona que no tiene fe, sino que está segura, tiene experiencias de algún tipo, tiene constancia de cosas y es tan evidente eso como si mirara la luz, como si mirara un cara o si viera un reflejo de una cosa en la pared, le es evidente y no se trata de que tome los datos que le han enseñado como una realidad, no se trata de que crea porque le han dicho, sino que se trata de que lo experimenta con realidad porque tiene un registro de eso.


No pretendemos que haya una posición mejor que otra, no, pero decimos que hay esas cinco posiciones, cada uno puede ubicarse en alguna de estas posiciones, o todas estas, pero algo más, las cosas no son tan estáticas, por ejemplo, hay días que yo creo que hay una cosa después de la muerte, pero hay días que no creo nada de eso, (risas), resulta que yo mismo también cambio de postura frente a este punto, es más, cuando yo era joven y participaba de cierta religión y demás, yo creía firmemente en la trascendencia por ejemplo, y ahora no creo nada de eso, y dentro de dos años probablemente voy a seguir sin creer en eso pero voy a pensar "qué bueno sería creer en eso". Comprenden ustedes la movilidad que tiene esto de las posturas frente a la muerte, la trascendencia y todo aquello. Es muy móvil, no es una cosa tan firme.
Para complicar más el esquema sucede que, no hay solo cinco posturas frente a la muerte, la trascendencia, no solo eso, sino que hay distintos grados de profundidad en cada postura. Por ejemplo, una persona nos acompaña por la calle, vamos caminando y hablando, es de noche, vamos pasando cerca de un cementerio, esta persona nos está explicando que ella es escéptica y que no cree en nada que tenga que ver con la trascendencia... Le pedimos que nos espere un poco ahí, porque tenemos que hacer unas cosas, que vamos a venir después a buscarla, y vemos que, se viene rápido al lado nuestro y nos cuenta que él tiene problemas de noche con los cementerios, (risas), y nosotros le decimos, "pero cómo no es que... es escéptico, racionalista, materialista, y bueno, y acá no hay entidades raras que te puedan atacar, o te puedan crear problemas", y nos dicen, "yo no creo ni en el espíritu, ni en el alma, ni en la trascendencia, ni en los muertos que viven, ni en los vivos que mueren, (risas), y sin embargo, esto me crea problemas. ¿Cómo es?, ¿cómo es posible que esa persona que dice eso, sienta otra cosa? Puede ser que cada posición frente a la trascendencia y a la muerte y demás, admita distintos grados de profundidad, puede ser que ese señor sea ateo, pero ateo de primer grado, que tenga una fe débil en el ateísmo, no es un ateo sólido, es suave, un aficionado, no es un profesional. (risas).
Pero claro, hay distintos grados en estas posiciones, uno puede ser un ateo dudoso, y puede ser un ateo más convencido y más convencido y por último uno puede tener una fe definitiva en el sentido de que nada pasa después de la muerte, es así. Tomamos la otra postura, la postura de aquel que considera esa posibilidad intelectual y, en primer grado o en un grado mayor de profundidad o en un grado mayor, y si es una grado mayor de profundidad, esa búsqueda se convierte en investigación, en lectura, y lo mismo sucederá con aquel que quiere tener fe, y cuando algo le ha salido mal en sus negocios, se va con nosotros a un bar, se sienta y nos dice: "yo quisiera tener fe", muy bien, ¿en qué grado de profundidad quisiera tener fe?, eso lo dice en este momento porque le salió mal un negocio, por ejemplo, pero podría ser que efectivamente hiciera todo lo posible por lograr despertar en él, un sentimiento profundo de tal modo que se convirtiera en una convicción, ¿se entiende esto?, hay distintos grados también de "querer creer", y hay distintos grados de "creer", y hay distintos grados de experiencia y de certeza sobre este asunto de la trascendencia.
Bien, ¿pero y eso qué tiene que ver con nosotros?, tiene que ver mucho con nosotros porque, claro, generalmente la gente lo que pide..., bueno, finalmente, ¿como se resuelve esto de la trascendencia?, no vayamos tan lejos, es mucho más interesante saber como está ubicado uno, para uno.
Si yo ahora pienso en esto, yo me digo: ¡no creo nada en este asunto de la trascendencia!, muy bien, ¿en qué grado?, ¿con qué profundidad? O bien yo me digo: sí, la trascendencia..., ¿en qué grado?, ¿con qué profundidad?, no basta con ubicarse en una de esas posturas, sino que es interesante además investigarse a sí mismo y ver, en qué grado y en qué profundidad estoy en cualquiera de esas posturas. Miren, según uno se ubique en este problema, así es la vida de uno. Si ustedes miran hacia atrás y recuerdan otra etapa de su vida, fíjense todo lo que hacían y fíjense también como se ubicaban frente a esto, y van a ver que homogéneo resulta, que parece, van a ver cómo cuando no creían en absoluto en la trascendencia y todo era un absurdo y una contradicción y demás, ya van a ver que absurda y que contradictoria era la vida de ustedes, ya van a ver cuando ustedes creían o tenían una fe, que les despertaba en un determinado esfuerzo, ya van a ver que energía tenían y como todo se ordenaba y como los problemas que tenían, casi no los tocaban ustedes porque estaban cubiertos como con una coraza que los defendía frente a las dificultades de la vida diaria, porque podían asimilar los golpes y podían considerarlos como una enseñanza, como una prueba, ¿si?
Bastará con ubicarse en épocas pasadas y ver que sentían en esas épocas respecto a este asunto de la trascendencia, bastará ubicarse en el momento actual y decir: bueno, finalmente yo qué, ¿cómo me ubico?, ¿qué pasa, me muero, y?, ¿cómo es esto?, ¿qué sentido hay en mi vida? Yo tengo muchos sentidos, sentidos provisorios, y claro, tengo este, el otro, el otro, el otro... ¿pero qué sentido definitivo y final tengo?
Parece que si no hay un sentido definitivo y final, tengo un sentido pequeño que me tironea para allá, otro para allá, estos dos se oponen, me crean problemas hasta de elección, por un lado quiero una cosa, por otro lado quiero otra cosa, esas cosas se oponen y me crean problemas. Si no tengo un sentido definitivo estoy dividido, puedo querer dos cosas que se oponen, eso que parece una excepción es lo más normal, es lo más frecuente, normalmente quiero dos cosas que se oponen, es raro esto, pero humano. No hay posibilidad de que se combinen esas cosas, esos sentidos provisorios sin un sentido definitivo alguno.
¿En qué situación estoy frente al problema de la trascendencia y frente al problema de un sentido inmóvil?, no de estos sentidos contradictorios... Es una buena investigación sobre todo esto, es un buen examen de conciencia, es algo que ayuda enormemente a clarificarse uno y es algo que ayuda mucho a orientar la propia vida. La investigación no es difícil, basta con que yo me pregunte en este momento: ¿qué pienso respecto de la trascendencia?, ¿qué me pasa a mi respecto a la muerte?, para que yo comprenda la situación en que vivo y para que comprenda que me pasa con los sentidos provisorios de la vida.

1991 - Los medios de producción deberian estar en manos de la sociedad que es la que produce los bienes


Nosotros decimos que si es la sociedad la que produce los bienes, ella debe también detentar los medios de producción. Ojo, que no es el modelo estatal que utiliza el aparato como monopolio de la concentración y la distribución económica. Se suele decir, bueno, pero el Estado es el administrador. Lo es, mientras no venga un dictador o un grupo multinacional y se apodere de él. De modo que confundir el Estado con la sociedad me parece un exceso.
"Estamos pensando, por ejemplo, en las cooperativas, que no han funcionado bien en Yugoslavia, y que tampoco han sido eficientes en el sistema capitalista. Pero cuál es el contexto social. Si en el sistema capitalista a las cooperativas no les das créditos preferenciales ni favoreces la participación de la gente, ¿cómo no van a fracasar? Si en el sistema socialista, que hemos conocido, las cooperativas no son más que un instrumento del partido, ¿cómo no van a fracasar? No me parece bueno invalidar el sistema cooperativista por el hecho de que hayan mostrado ineficiencia o fracasos en los dos sistemas que hemos conocido, porque hay explicaciones para ese punto. Entonces como ideal, además que me parece un ideal decente y coherente con nuestra forma de pensamiento, por qué no apelar a que los medios de producción estén en manos de la sociedad que es la que produce los bienes.

1991 - Debemos poner en marcha los valores de la intención humana y denunciar todo aquello que aliene


La fraternidad, uno de los tres principios que inspiró a la Revolución Francesa y que ha animado lo más positivo de las grandes religiones: la hermandad humana. Porque si se habla de Igualdad y Libertad sin esa maravillosa solidaridad humana -esa potencia interna que hace que las acciones más verdaderas terminen en otro y no en mí-, tal Libertad y tal Igualdad serán sólo formales dentro de un frío sistema jurídico y de una fría técnica económica y social. Esto que digo en torno a la Solidaridad, no son sólo palabras, es un modo de vida y una práctica personal y social.

1990 - Igualdad, Fraternidad, Libertad, Solidaridad


La fraternidad, uno de los tres principios que inspiró a la Revolución Francesa y que ha animado lo más positivo de las grandes religiones: la hermandad humana. Porque si se habla de Igualdad y Libertad sin esa maravillosa solidaridad humana -esa potencia interna que hace que las acciones más verdaderas terminen en otro y no en mí-, tal Libertad y tal Igualdad serán sólo formales dentro de un frío sistema jurídico y de una fría técnica económica y social. Esto que digo en torno a la Solidaridad, no son sólo palabras, es un modo de vida y una práctica personal y social.

1990 - Un proyecto común que venimos construyendo miles y miles de personas en todo el mundo



Y son tantas y tan diversas sus actividades que necesariamente queda involucrado como interés todo lo que ocurre al ser humano en todos los campos. Parafraseando a otros, "nada de lo humano nos es ajeno". El movimiento más que una organización es un punto de vista sobre el ser humano, un sentimiento y una forma de vivir. Es algo integral en que las actividades particulares están enhebradas coherentemente como las cuentas en un collar. Para nosotros importa la coherencias entre el pensar, el sentir y el actuar y todo lo demás, si no responde a esta coherencia -sobre la que tratamos de ahondar y mejorar cada día, habida cuenta de nuestros numerosos defectos-, es mera palabrería o burdo "pragmatismo", cuando no cosas peores. Pero si me apura en una respuesta corta, le diré que nuestro proyecto es un proyecto integral para el desarrollo del ser humano no considerado en abstracto, sino en su existencia cotidiana. Es una nueva forma de vida personal y relacional.

1990 - SILOISMO


El siloísmo debe mucho a la fenomenología como método de pensamiento y a las corrientes existenciales, en general, por el acento puesto en la precedencia de la existencia a la esencia; en la toma de conciencia del primado de la vida humano sobre toda teoría o interpretación en la que el ser humano aparece en toda su dignidad de agente histórico y no simple paciente, o epifenómeno, o reflejo de condiciones objetivas. Por lo demás, también se siente tributario del pensamiento universal y no exclusivamente de una corriente próxima en términos históricos y geográficos. El siloísmo no se siente occidental u oriental en su pensamiento, más bien experimenta que toca las raíces humanas de todas las latitudes y que es tocado y enriquecido por ellas.

1989 - Cuando el desvencije sea grande, la gente necesitará referencias ante el despelote


Hay un desvencije sicológico. La gente continuamente se la pasa haciendo cosas que no quiere y no siente. La gente se la pasa haciendo cosas de modo obligado. No saben lo que quieren y lo que no quieren. Cuando el desvencije sea grande, la gente necesitará referencias ante el despelote.
Cuando todo se acelere tanto que no se pueda elegir, todo irá a la búsqueda de referencias y habrá que ver qué referencias pone cada uno. La desreferenciación no es tolerable, es neurotizante. Muchos producirán modelos a partir de esa neurosis que den fijeza al desorden (modelos "monstruos").
En algunos puntos la palabra seguridad va tomando fuerza. Pero no sólo por el problema de la seguridad social sino por los cambios tan dinámicos que no se soportan en términos psicológicos.

1989 - No existe la experiencia externa



La experiencia del herrero es interna, que se forja por acción (lo que va formando). La experiencia, aprendizaje, es inevitablemente interna. Nunca es externa. No se la puede localizar afuera. Es impresionante un punto de vista tan erróneo. Acumulación de experiencia interna. Experiencia empírica, no necesariamente ordenada.

Hay algo en el hombre que hace que haga lo que hace. Algo muy particular. Diferencia entre perro y hombre. Aparato diferenciado y particular del ser humano. Los perros se pueden cagar de hambre, pero será muy difícil que hagan una revolución por ello. El hambre (como estímulo), sin estar acompañado de inteligencia, sin organización, etc., no es nada. Me parece difícil entender la Historia sólo como hambre.

En ese avance frente a la inercia se desarrollan otras cosas (como la tecnología). Superación de situaciones y de proyectos como avance sobre las cosas que se oponen al desarrollo. Surgen las resistencias al avance en esa intención.

Veamos que es lo que caracteriza al ser humano. Hasta hace poco el mundo no había llegado a eso.

Todo se ha ido desarrollando desde él hacia las cosas. Desde él, el ser humano, desarrolló las cosas. Se agotó la externidad, la mirada desde las cosas. la mirada externa está errada, se agotó.

1989 - La mística sin registro es necedad. No nos conviene


Sí nos conviene un más elevado trabajo atencional y todo lo demás se dará por añadidura. No "tomar el cielo por asalto". Entonces las cosas se empiezan a poner más sugerentes, con más relaciones entre sí, etc. Si uno tiene mayor nivel de conciencia entonces puede advertir más cosas.

1989 - La configuración es una cosa y el ponerse en frecuencia para que encaje esa configuración es otra



Dos problemas a resolver.- 1) Configuración correcta. 2) Disponibilidad inmediata, ponerse en el "canal 7".

La configuración es una cosa y el ponerse en frecuencia para que encaje esa configuración es otra.

Los guías son imágenes (de cualquier tipo) protectoras, en general. Son importantes para la configuración que la imagen tenga todos los atributos de sabiduría, bondad y fuerza.

¿Cómo saber ponerse en frecuencia? Es un llamado que a uno lo pone en un canal particular y el Guía aparece. En el uso del llamado, este debe tener encaje con el tipo de guía.

Trabajo de la cosa auditiva (estudiar mejor el tema de entrar en frecuencia a través de la música. El llamado podría ser una música).

Imagen sintética. Armado con diferentes personas existentes o inexistentes con carga. No importa que sea infantil.

Para configurar bien el Guía se podría realizar un trabajito sobre los propios modelos (a partir de la biografía, ensueños, etc.).

Tiene que ser muy grato, muy cálido, muy cercano, muy próximo. No puede ser que sea una joda conectarlo. Tiene que salir facilito.

No moverse con un panteón de guías. Mejor una buena imagen que sea reconfortante, apoyadora, de tal modo de eliminar estados psíquicos de soledad, abandono, impotencia, de no salida. Todos esos rollos inhiben.

El guía puede ser femenino. No importa su sexo o también puede ser neutro. Es más sintético, una imagen, cálida, sintética, compacta.

Algo que a uno le gusta imaginar, puesto en el "coco". El pescador de "El viejo y el mar" (Ernest Hemingway) soñaba con leones que se lamían, etc.

Una imagen que tiene que salir fácil y ser gustosa. Si encima que está uno cagado tiene que hacer esfuerzo para que salga...

El tema del Guía tiene una función distinta a la de la Fuerza, no tiene tanta importancia como el tema de la Fuerza. Tiene su importancia para situaciones jodidas de impotencia, encerronas, de no salida, etc.

Es un tema referido a los apoyos psicológicos. Para mucha gente es un apoyo psicológico importante. Es una cuestión bastante más personal que grupal en relación a otras prácticas como la Fuerza que tiene también cosa grupal cuando se la experimenta en conjunto).

La oración es un mecanismo pariente del Guía, de apoyo psicológico.

Hay gentes que rezan aunque no crean en nada. Es un mecanismo primitivo, pero funciona. Habrá que enseñarles a rezar.

El Guía tiene que ser básicamente sentido.

Si quieres que dispare hacia adentro, debes emplazarlo dentro.

Un guía es sentido, desde adentro, en el intracuerpo, cálido, profundo, muy cercano. Los guías más profundos son los más sentidos.

Sólo hay que tener que estar claro en el sentido de necesitar al Guía. Si uno cree que no lo necesita, no tiene sentido.

Los guías son básicamente apoyos y no tipos que vienen a hacer el trabajo que tienes que hacer tú.

Pregunta antes de configurar: ¿Acaso es que tú necesitas apoyo psicológico? Si así es, entonces no viene mal un guía.

Puede servir en tanto y en cuanto modelo para disponer conducta en una dirección, como orientador de conducta. "Quisiera ser como esto que he armado". Continuamente están trabajando modelos asquerosos, producto del sistema.

viernes, 5 de agosto de 2011

DE LAS RELACIONES ENTRE ACTO Y OBJETO


A ver si se fijan, nosotros siempre hablamos –y es muy sistemático y esta acorde con otros Puntos de Doctrina- de las relaciones entre acto y objeto, por ejemplo decimos que si tenemos un objeto y un acto lanzado y sacamos ese objeto nos quedamos con la energía del acto. En principio están absolutamente ligados, decimos también que hay un trasfondo emotivo que corresponde a un objeto, pero que dado el objeto, podemos en ocasiones sacarlo y quedarnos con el trasforndo emotivo y trasladarlo, transferirlo, colocarlo en distintas cuestiones. Así decimos también que el sillar natural y material de esta correntada bioenergética es el cuerpo, y que en principio, disolvemos el cuerpo y disolvemos esta correntada energética.



1989 - EL DESVENCIJE PSICOLOGICO


EL PENSAR DINAMICO.- El pensar fija conceptos y en una situación social muy dinámica como la actual presenta una paradoja. El concepto fija y la cosa objetal es dinámica. Los pensamientos dinámicos presentan una paradoja (Ej. la teoría de la relatividad). El pensar dinámico está destruyendo el armado que correspondía a la fijeza objetal. El pensar relacionado con la dinámica social tiene que ver con la aceleración del tiempo histórico (p.ej. aceleración en la producción objetal).
A la gente se la ha metido en una cápsula y se la ha acelerado. Antes el pensar estaba organizado en base a una materia prima estática (ejemplo de la silla y las tres generaciones). El pensar tradicional no puede asimilar la aceleración y entonces hay reacciones que muestran el malestar (p.ej. "libertad no es lo mismo que libertinaje"). A las sociedades estáticas, que están desfasadas con respecto a las dinámicas, también les sucede (ejemplo de sociedad dinámica son las de aceleración tecnológica). Ya en la década del 60 se veían estos síntomas reaccionarios (ej.de la canción de Los Beatles, "Paren el mundo que me quiero bajar....").
Una respuesta de adaptación es el pragmatismo. Son respuestas cortas, no se sabe que harán cuando vengan 10 preguntas simultáneamente....
Hay un desvencije psicológico. La gente continuamente se la pasa haciendo cosas que no quiere y no siente. La gente se la pasa haciendo cosas de modo obligado. No saben lo que quieren y lo que no quieren. Cuando el desvencije sea grande, la gente necesitará referencias ante el despelote. Cuando todo se acelere tanto que no se pueda elegir, todo ir a la búsqueda de referencias y habrá que ver qué referencias pone cada uno. La desreferenciación no es tolerable, es neurotizante. Muchos producirán modelos a partir de esa neurosis que den fijeza al desorden (modelos "monstruos").
En algunos puntos la palabra seguridad va tomando fuerza. Pero no sólo por el problema de la seguridad social sino por los cambios tan dinámicos que no se soportan en términos psicológicos.

1989 - Emprender la tarea de humanizar el mundo, para abrir su destino hacia una vida nueva


En El Paisaje Interno, se afirma la libertad de la vida humana. Es mas, se dice que su sentido es, por esencia, libertad y que esta libertad rechaza el absurdo y la noción de lo "dado", aún cuando lo "dado" sea la misma naturaleza.
Y esta decisión de ampliar la libertad no queda limitada al individuo ya que éste no tiene naturaleza, sino que al darse en un proceso histórico, responsabiliza al individuo con el conjunto humano.

El mundo objetal puede ser modificado y transformado por el hombre, pero en tanto‚ el mismo no se considere en devenir y transformación, sus objetos seran portadores de su falta de sentido y nihilizaran al mundo. Por todo lo anterior, en el capítulo VII, se dice: "Nombrador de mil nombres, hacedor de sentido, transformador del mundo... Tus padres y los padres de tus padres se continúan en ti. No eres un bólido que cae, sino una brillante saeta que vuela hacia los cielos. Eres el sentido del mundo y cuando aclaras tu sentido, iluminas la tierra. Cuando pierdes tu sentido, la tierra se oscurece y el abismo se abre."

"... Te diré cual es el sentido de tu vida aquí¡: humanizar la tierra. Qué es humanizar la tierra? Es superar el dolor y el sufrimiento, es aprender sin límite, es amar la realidad que construyes... No cumplir s con tu misión si no pones tus fuerzas en vencer el dolor y el sufrimiento en aquellos que te rodean. Y si logras que ellos, a su vez, emprendan la tarea de humanizar el mundo, se abrira su destino hacia una vida nueva".

El Paisaje Interno trata, en resumidas cuentas, del sentido de la vida con referencia a la lucha contra el nihilismo en el interior de cada ser humano y en la vida social, y exhorta a que esta vida se convierta en actividad y militancia al servicio de la humanización del mundo.

1975 - La preocupación no está en adquirir cosas sino en dejar mentalmente cosas


SOBRE LA BÚSQUEDA DEL OBJETO. Yo creo que nuestro problema mayor es que todos buscamos objetos, y que algunos pueden no buscar objetos pero pueden buscar completarse internamente. Esta búsqueda también trae contradicciones: hay quien se considera incompleto internamente entonces hace fuerza por integrarse internamente, por ser completo en sí mismo. Sea que alguien busque objetos afuera o sea que busque completarse internamente, de los dos modos sufre contradicción.
En general los buscadores de cosas espirituales buscan o “la conciencia mística”, o buscan un dios, o buscan estar completos, iluminados. El Buda planteó ese mismo problema y explicó que para lograr la iluminación no había que buscar la iluminación. Pero, entonces, ¿cómo se va a lograr una cosa si no se la busca? Es que nosotros no buscamos lograr una cosa, nosotros no planteamos esto en sentido posesivo. Nosotros no decimos que haya que tomar algo para integrarlo, que haya que tomar objetos para tenerlos; nosotros decimos otra cosa: que hay que suprimir las contradicciones, suprimir el sufrimiento.
Nosotros definimos nuestro trabajo no como de “mano llena”, sino como de “mano vacía”. Ustedes saben cómo se cazan algunos monos: se coloca arroz en un tronco de un árbol, en un orificio pequeño; entonces el mono mete la mano en el agujero, toma el arroz y no puede sacar la mano; el mono ve que lo van a cazar ¡pero tampoco quiere soltar lo que tiene en la mano! ¡El mono sufre una gran contradicción!
Nosotros decimos que no se trata de lograr cosas ni de lograr estados superiores de conciencia tampoco; nosotros hablamos de la mano vacía, nosotros hablamos de suprimir el sufrimiento interno, nosotros decimos de soltar las búsquedas internas. Nosotros no nos rendimos frente al dolor, a nosotros nos preocupa salir de la contradicción, entonces esa preocupación no está en adquirir cosas sino en dejar mentalmente cosas. Tú puedes tener cosas en la vida cotidiana, pero tú no estás buscando llenarte de cosas. Te pueden interesar mucho los estados superiores de conciencia, pero te creas mucho dolor interno. Parece que se lograran cosas haciendo el vacío y no llenándolo. Tú lograrás más atención cuando trates de lograr un vacío en tu mente y no cuando la contemplas sobre un objeto; así sucede con muchos fenómenos.
En general, nosotros estamos habituados y educados a lo opuesto; estamos acostumbrados a tomar no sólo objetos sino personas. Nosotros queremos tomar a los sentimientos de las personas, queremos ser queridos, queremos ser reconocidos, queremos ser amados. La misma forma nuestra de amar es una forma posesiva. Nosotros amamos con violencia; no se nos ocurre cómo pudiéramos amar sin cierta violencia, pero para todo hay formas.
Está bien que nosotros conozcamos cosas, que nos informemos acerca de cosas, uno puede informarse de muchas cosas, pero no puede imponerse la creencia de que nuestra información soluciona los problemas. En general, la gente de formación intelectual cree que el acumular datos soluciona sus problemas internos. En realidad, solucionan muchos problemas de la vida diaria; es gracias a la experiencia acumulada, es gracias a la gente que ha ido trabajando con datos, con técnicas, que la humanidad ha ido resolviendo muchos problemas. Nosotros no podríamos estar acá hablando si muchas generaciones no se hubieran esforzado en elaborar un lenguaje, en elaborar, por último, la ropa que usamos. De ninguna manera descalificamos el esfuerzo humano para solucionar problemas inmediatos. Nosotros estamos diciendo simplemente que el trabajo interno puede no ser similar al trabajo que se hace en la naturaleza, en el sentido que nosotros estamos acostumbrados a la lucha con la naturaleza, con las leyes naturales; y está bien, así se mueve la humanidad. Pero puede ser que esta forma no sea adecuada para el trabajo interno. Entonces, nosotros distinguimos muy bien entre el trabajo que se hace en la naturaleza, en la vida diaria, y la actitud mental que se tiene sobre las propias contradicciones. Si la naturaleza nos impone lucha y todo ese fenómeno de alteración, tal vez la compensación de todo eso debe buscarse en la quietud interna.


Nosotros somos muy amigos de generalizar y creer que las leyes son iguales para todos los fenómenos universales, pero tienen distintos planos de aplicación. En el plano de lo interno no parece válido el sentimiento de posesión; en la lucha con la naturaleza parece imprescindible la posesión. Lógicamente que el sentimiento de posesión puede tener un carácter más individual que social, pero a medida que las sociedades avanzan el sentimiento se va haciendo más social que individual. Pero en materia de trabajo interno no vemos este progreso, no vemos esta evolución.

Nosotros con nuestra conciencia individual, con nuestro “yo” individual, filtramos todos los datos que vienen del mundo o interpretamos al mundo según ese filtro, y las cosas pueden ser muy diferentes a las que filtra nuestro yo. Hay algunos que han llegado más lejos todavía y han creído que ese yo debe ser inmortal. ¡Imagínense qué aburrido puede ser vivir millones de años con ese mismo yo, con ese yo individual, si para el colmo es un yo en contradicción y sufrimiento!
Cuando por algún accidente han experimentado una alegría muy grande, súbita, o han experimentado una comprensión de las cosas también muy grande, o esos fenómenos súbitos de gran emoción, observen ustedes que en esos casos no han pensado en su yo; da la impresión de que hubiera sucedido otra cosa: que el yo hubiera desaparecido. No se han dicho en ese momento: ¿qué me está pasando?; ustedes más bien han contemplado y han sentido esa experiencia, y cuando se han puesto a pensar sobre lo que les está pasando tal fenómeno ha desaparecido. No se sabe si el fenómeno desaparece porque aparece el yo o a la inversa, lo cierto es que ese fenómeno es incompatible con el yo sicológico. Ustedes, sin embargo, pueden decir que han tenido esa experiencia, pero saben que esa experiencia no es la misma que tienen con el yo sicológico. Esa experiencia no es posesiva, esa experiencia es muy amplia, como universal; esa experiencia ni siquiera la atribuyen a ustedes y tienen la emoción que debería ser comunicada a toda la humanidad. Estamos hablando, entonces, de un fenómeno notable para la conciencia humana, en donde el yo posesivo no aparece, en donde no aparece la búsqueda y algo se produce, y cuando queremos producirlo no funciona; tampoco se logra eso por buscarlo.

Si buscamos sentirnos bien es probable que no lo logremos. Si, en cambio, a esa tensión emotiva que tenemos por estar juntos varias personas tratamos de dispersarla internamente, de relajarla, de aflojarla, en realidad no estamos tratando de adquirir cosas, en realidad no estamos pensando en sentirnos bien, estamos pensando simplemente en soltar las tensiones emotivas; y si podemos trabajar en eso de soltar las tensiones emotivas, entonces nos sentimos bien. De manera que procedemos con la mano vacía: nosotros no buscamos sentirnos bien, buscamos aflojar esta tensión, entonces nos sentimos bien por añadidura. Ese es el sentido del trabajo y no es un renunciamiento ni un sacrificio ni una autoeliminación. ¿Entienden aproximadamente la idea?

En el plano de lo interno no parece válido el sentimiento de posesión


Nosotros somos muy amigos de generalizar y creer que las leyes son iguales para todos los fenómenos universales, pero tienen distintos planos de aplicación. En el plano de lo interno no parece válido el sentimiento de posesión; en la lucha con la naturaleza parece imprescindible la posesión. Lógicamente que el sentimiento de posesión puede tener un carácter más individual que social, pero a medida que las sociedades avanzan el sentimiento se va haciendo más social que individual. Pero en materia de trabajo interno no vemos este progreso, no vemos esta evolución.

1973 - La mecánica total de la conciencia busca completarse en un objeto definitivo


El núcleo de ensuefio no es una forma o imagen representada, sino precisamente toda la estructura mental trabajando en compensación estructuradora frente a la masa de estimulos, con su tono característico en cada ser humano.
Cuando la conciencia completa su acto de búsqueda, da con el núcleo y éste aparece como forma, como imágen, quedando eliminada la angustia que provoca ese formidable acicate del núcleo de ensueflo.
Pero cuando el núcleo queda formalizado, cuando el acto se ha completado, una nueva búsqueda comienza a desarrollarse.
Los "arquetipos" que mencionan algunas corrientes sicológicas no son sino esos núcleos de ensueño ya completados como forma y por tanto, superados por la conciencia en marcha.
¡Curiosa paradoja!, los arquetipos dejan de actuar cuando son formalizados como tales, mientras que antes de dar con ellos no son arquetipos sino imágenes o formas que no satisfacen del todo; formas difusas, no completadas totalmente.
Proyectando estas ideas a un ámbito mayor, se comprenderá cómo la mecánica total de la conciencia busca completarse en un objeto definitivo... allí surgen las diversas formas de la inmortalidad, que jamás se cumplen, porque la conciencia no puede ser completada totalmente en transcurrir. La inmortalidad está fuera del tiempo, es Ia forma de la compensación estructuradora total.
No basta entonces, con inferir ingenuamente que la búsqueda de la inmortalidad sea una fuga de la realidad cotidiana. La busqueda de la inmortalidad está en la estructura dinámica de la conciencia que en su proceso y en su historia, va completando sus pasos con dioses provisorios, con angustiosos arquetipos que se derrumban de edad en edad.
En numerosas leyendas se busca el "don" de Ia felicidad, se transita por desiertos, cavernas, montañas y mares; se consulta a sabios y a magos, se lucha contra fuerzas y monstruos, para dar con ese imponderable que tiene el sabor de recuerdo, el mismo recuerdo de un Paraíso perdido, el mismo sabor de extrañamiento y pena, que se desliza en el corazón de los hombres grandes, semidioses caídos de su patria oscuramente recordada.
He ahí en proyección la estructura del acto en busca de su objeto, propia del mecanismo de evocación, pero lanzada hacia el futuro. No es extraño encontrar entonces en muchas teorías de futuro ultramundano, la idea del recuerdo, del reencuentro con el pasado o de la línea que originándose en un punto, regresa a él, transitando hacia el futuro, describiendo un círculo.