martes, 26 de abril de 2011

1986 - Ahora el mayor problema de él acá es que está pensando todo el tiempo, acá


Hay gentes que tienen problemas en la vida cotidiana, entonces quisieran encontrarse con una especie de ámbito de paz para su desarrollo interno. Muy bien. Les digo ésto, porque se ha hecho muchas veces, no es improvisación, se ha experimentado. Entonces tomamos a este señor, a esta señora que tiene ese problema en la vida cotidiana, nos lo llevamos a ese lugar donde se produce una especie de vacío de condiciones externas, lo llevamos a ese lugar y empiezan a producirse funcionamientos raros, por ejemplo, mientras está en ese lugar se la pasa pensando en el otro lugar. ¿Pero qué es ésto? Así que sucede que él tiene grandes problemas acá y él está preocupado por esa cosa interna, entonces lo traemos acá. Ahora ya está en esas condiciones. Ahora el mayor problema de él acá es que está pensando todo el tiempo, acá. Entonces, eso de que viene de acá a acá, eso es totalmente superficial. Eso pertenece también al campo de lo biográfico, de lo periférico, de lo no resuelto. Usted lo que tiene que hacer es resolver las cosas..., ¡ah, y párece bien y vaya para allá! (risas). Eso es lo que tiene que hacer usted y no andar con esos rollos! (risas). Entonces siempre aparece una ambigüedad en nosotros con el tema, siempre hay una ambigüedad. Que se acerca uno y empieza a hablar de lo espiritual y nosotros ya..., ¿eeeh?... ¿Y qué espiritual?, ¿a ver, donde está el espíritu, a ver? (risas). ¿Qué ha comido hoy, cuántas horas durmió? Claro porque esta otra historia ya la tenemos muy sabida.

En realidad, estos de las búsquedas profundas y demás hablan poco del espíritu, de la profundidad, de eso, poco. Los que hablan mucho de eso es como lo que hablan mucho del amor. Y cada vez que alguien menciona la palabra espíritu, yo cuido el bolsillo (risas).

1986 - Descubrieron y manejaron llaves del conocimiento profundo


En su momento y en otras civilizaciones, otras culturas, o también en esta misma pero en sus primeros tiempos, existieron esas cosas que algunos llamaron monasterios, cosas de curas (risas). Esas unidades monásticas, que de algún modo, en esas unidades monásticas, en algunos momentos se desarrolló el espíritu. ¿El espíritu? ¿Quién es ese caballero? (risas), por dar un nombre. Sí, sí. Para bien o para mal y con gente a lo mejor muy poco ilustrada, muy ignorante desde el punto de vista de los conocimientos prácticos ¿no es cierto? Y de los conocimientos teóricos ni hablar (risas). Gentes a lo mejor muy analfabetas, dada la época, con mucha torpeza y también con mucha brutalidad en ocasiones, gente con mucho error conceptual, gente muy confundida, gente también muy aprisionada por las creencias de la época, con muchos temores, muchos terrores, gentes que temían a sus dioses, a sus diablos, a sus rarezas, a sus contenidos internos y que bien que mal, tal vez a fuerza de repetir las cosas avanzaban en su conocimiento interno. Es muy sorprendente encontrarse con enormes avances sicológicos internos en unidades monásticas muy primitivas del tipo de las tibetanas; es muy sorprendente el avance sicológico profundo de gentes que a lo mejor no sabían ni leer ni escribir. Pero que a fuerza de repetir cosas habrían puertas internas ¿no? Y logrando buenas experiencias venían nuevas generaciones profundizando en esa dirección. Pero les digo, y para los que son aficionados a estos estudios, que van a encontrar en distintas civilizaciones y momentos del mundo, y un poco albergadas en las religiones, un poco protegidas aunque siempre desconfiadas, aunque siempre desconfiadas por esas religiones, van a encontrar esa suerte de unidades monásticas en donde grandes maestros, por darle un nombre, sí, manejaron llaves del conocimiento profundo. Sí, es indudable ésto, si se lo pesquisa bien, si se lo sigue en profundidad. Descubrieron y manejaron llaves del conocimiento profundo.



Cubiertas por esa suerte de manto de lo religioso, no se que afinidad tendrá esa cosa religiosa o religiosoide, alguna cosa, respecto del trabajo interno profundo.

Es espectacular, descubrimientos espectaculares acerca del funcionamiento interno, en civilizaciones pero que es un desastre, totalmente primitivas. Una tecnología donde siquiera tenían la rueda, una tecnología de lo último, tecnología cotidiana. Y una tecnología sicológica que parece de otro planeta, espectacular también la disparidad entre la tecnología sicológica y la tecnología, cosa de locos.

Y claro, descrito, comentado con un sistema alegórico impenetrable, impenetrable, alquimistas enloquecidos que hablan de dragones, de cosas raras, de fuegos, de humos, de piedras filosofales; tibetanos que hablan de Budas que están adentro de no se que flores; cristianos que hablan de que en el corazón aparece Cristo y les hace una cosa; mahometanos que hacen no se que sistema respiratorio y con esa respiración se inspiran y van a dar a no sé qué cielo. ¡Fantástico!

Y claro, para un sicólogo contemporáneo bastante..., sí, sí, formas esquizofrénicas (risas), claro, sí, todos somos tontos hasta que apareció usted (risas), sí, usted es el único vivo... (risas). Las civilizaciones, el ser humano, el desarrollo humano ha trabajado para llegar a usted que es el mayor exponente de la civilización (risas). Y todo lo demás, cretinos, desde la ameba al señor sicólogo... (risas), ¡ah, que bien! ¿Y cuánto demoró usted en obtener esos conocimientos? ¿Cinco años en la facultad de sicología? ¡Braaavooo!... (risas). ¿Y cómo estudiaba, en salida de baño..., qué hacía, tomaba mate, qué...? (risas). Pero, qué es ésto?, pero qué es ésto? Mmm. No saben, no estudian, no aprenden. No estudian, no estudian...

Los buenos sicólogos que han estudiado con más profundidad, gentes más profundas y con verdadera vocación, no será para después andar cobrando unas cosas como hacen, no, los buenos sicólogos, gentes profundas como Jung y demás, que entraron en esa cosita del estudiante que no sirve..., y no, se fueron encontrando con el lío. Se fueron encontrando con el lío y se fueron poniendo más seriecitos en ésto, más moderados, ¿eh? Ha habido gente también ahí que ha llegado a comprender la profundidad de toda esta cosa. ¡Hubo hasta sicólogos que llegaron a comprender eso! (risas). Es de locos. Porque si hay una cosa totalmente alejada de lo que estamos hablando son esos señores de ese gremio. ¡Oh, claro! Mejor alguien del sindicato del calzado (risas), o, sí claro, de cualquier otro sindicato, de cualquier otro sindicato. Pero ahí hay, es serio, hay dificultades para entender la cosa. Pero algunos, bien, bien, bien dispuestos y haciendo las cosas lo mejor que han podido. Jung es uno de esos dentro de la sicología, claro que sí, bien. Claro, terminó rarísimamente, haciendo cosas raras, pero, bueno, pero bien, con anillos, con símbolos, con disfraces, un espectáculo (risas), ¿qué es eso?, pero bien, bien.

Así que estamos en este tema de los aceleradores y estamos en este tema de las disposiciones de ciertos ámbitos para que la gente pueda profundizar en sus preguntas más..., de mejor nivel. No estamos pensando ésto sólo para las cosas más periféricas que son una gran ayuda, de un sector apoyo que puede ayudar mucho a la gente nuestra a dar cohesión sicológica y a todo ésto. Bueno, es una disgresión, pero les digo, esta disgresión tiene importancia. Hay gentes más preocupadas por el desarrollo profundo, por el desarrollo interno. Y eso es importante. Cuando nadie está ya preocupado por ese desarrollo interno todo es externidad, todo es esqueleto, todo es forma, como pasa con las civilizaciones y las culturas cuando pierden su espíritu y quedan los grandes esqueletos que todavía se mueven mecánicamente, donde todo se puede diseccionar, cuantificar y donde las cosas ya no funcionan, no tienen sentido.

1986 - SE NECESITAN HERRAMIENTAS INTERNAS PARA NO DEJARSE SEDUCIR POR LA ESTAFA PERCEPTUAL DEL SISTEMA


Y necesitamos munir de ciertas herramientas a los nuestros para ya no luchar contra la ideología de un sistema, de eso se van a encargar los organismos. Los organismos se van a encargar muy bien de luchar contra los “ideologemas”, porque no son ni ideologías, es algo mal hecho, contra los “ideologemas” del sistema, organismos políticos, organismos, ¿eh?, de eso se van a ir encargando, de luchar contra un sistema político, de luchar contra un tipo de organización social inadecuada y de lo último. De eso se van a encargar los organismos.

Yo estoy hablando de otra cosa. Necesitamos munir a los nuestros de herramientas suficientes, de herramientas internas suficientes como para no creer en esas propuestas de quinta que hace el sistema! Propuestas de muy mala calidad pero, bueno, la gente no tiene otras referencias y ¡qué va a hacer!, creen en ella, en esa hipnosis del sistema por demás burda. Necesitamos munir a nuestra gente de esas herramientas.

Acuérdense qué está pasando ahora. La comunicación directa ha desaparecido. La comunicación es intermediada. Ni hablar de los grandes conjuntos humanos, donde un mequetrefe a través de una pantallita en un segundo llega a cinco millones de personas, por ejemplo, o diez, ¿les gusta doscientos?, doscientos. Podríamos llegar a dos mil. Y sí, claro, ya somos cinco mil millones de habitantes. ¿Y se puede? Y claro, sí, un mequetrefe empolvado puede salir..., es una de las condiciones, se dice que dios es ubicuo, que está en todo lugar y al mismo tiempo. Así que ahora nos encontramos a un mequetrefe puesto acá, pero que se lo ve en todos lados (risas). ¡Esto es fantástico! ¡Es como dios! (risas). Hemos reemplazado a dios por un mequetrefe (risas), ¡y empolvado! Es de lo último (risas).



Así que aparece un mequetrefe diciendo lo que hay que hacer, lo que no hay que hacer, lo que está bien, lo que está mal, claro, claro, y aparece el otro que diserta y explica las cosas y el otro que no está...

Bueno, así que necesitamos munir a los nuestros de recursos sicológicos como para caer en cuenta de toda esa estafa perceptual, de toda esa cosa que se propone, y se propone de modo compartimentado y donde el sistema de crítica y de autocrítica, está de moda ahora la autocrítica, el sistema de crítica y de autocrítica sicológico, ese sistema que se trata de barrer, ese sistema de crítica y autocrítica que es la condición de un nivel más despierto de conciencia, necesitamos nosotros que esté activo. Ustedes saben que una de las condiciones de la hipnosis es eliminar toda referencia del sujeto con el medio perceptual inmediato, que desaparezca toda crítica y que desaparezca toda autocrítica de lo que él está haciendo. Recuerden la experiencia de Jannet y de todos aquéllos, hablando de la histeria, por ejemplo, que ellos lo definían como un estrechamiento del campo de la conciencia sobre un objeto. Ese estrechamiento, que no es exactamente el de la atención, porque el de la atención tiene elasticidad y tiene reversibilidad. En el caso de la histeria, ese estrechamiento del campo de la conciencia permite hacer al hipnotizador, permite que le haga aparecer al hipnotizado, un elefante y el hipnotizado cree que es un elefante. Mientras que una persona no hipnotizada dice: eso no es un elefante. Y aunque vea el elefante, no sé por dónde ha entrado, porque esa puerta es chica, acá no veo una grúa.

A ver si me explico. La reversibilidad, la crítica y la autocrítica de la conciencia permite hacer comparaciones, tiene suficiente elasticidad como para descartar cosas que están dentro del ámbito de lo posible.

En la hipnosis sucede lo contrario. Se estrecha el campo de la conciencia y se lo fija sobre determinados objetos. No tiene reversibilidad, no tiene elasticidad, no tiene desplazamiento, no tiene comparación.

Así que esta falta de comparación, esta compartimentación que se está haciendo en el mundo de hoy de cada conciencia, esta desinformación respecto de temas importantes que permitirían cotejar, comparar, abrir la conciencia y flexibilizarla, este estrechamiento, este especialismo en la información o desinformación, esta forma de vida parcelada, y todo aquéllo, eso se parece mucho a la hipnosis. Es pariente. Y no estoy hablando de un complot, ¡qué complot!, no, no, no hay tal complot.

1986 - ACELERADOR. Condiciones para que haya mejores búsquedas


Bueno, pero sucede que hay gente y que hace preguntas profundas y que se hace de continuo y todo aquéllo. Esa gente busca sus respuestas y sus cosas. Sí, sería interesante crear condiciones adecuadas. Y cuando usted llegue a esas preguntas más interesantes será porque tiene resueltos los otros líos, ¿no?

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Y ahí está el acelerador de la cosa. Eso no hay que descuidarlo. Debe existir, me imagino, en el mundo actual, debe existir, seguramente, deben existir condiciones para que haya mejores búsquedas y mejor tecnología interna, deben existir. Y nosotros lo vamos a montar, independiente de que eso exista o no, nosotros lo vamos a montar.

1986 - Hablemos de la imagen. Hablemos de la movilidad de imagen


Bien, hablemos de otra cosa, hablemos de la imagen. Hablemos de la movilidad de imagen. Hay gentes muy educadas atencionalmente. hay gentes muy estudiosas y con un perfil atencional muy claro, muy preciso, muy fino, hay mentalidades matemáticas en ese campo, precisas. Eso no me garantiza en absoluto la movilidad de imagen.

Pero, ¿qué están diciendo? ¿Están diciendo entonces que un gran pensador o un gran matemático o un gran, qué, puede ser, un hipnotizador y puede ser un sujeto sin flexibilidad de imagen? Sí, estamos diciendo eso (risas). ¡Ah, pero es un gran talento! Sí, sí, como no, dele un premio Nobel de paso, ¿y qué? (risas). Todo lo que usted quiera, pero no hay flexibilidad de imagen. Va a ser un gran adherente a las propuestas del sistema. Ese mismo, ese, sí, ese va a fabricar la bomba para tirársela en la cabeza a otros. Y ese mismo, el de la atención perfilada, ese irreversible, ese mismo, sí, claro que sí. Hay que entender estas cosas, que lo uno no lleva a lo otro. Hay un tipo de educación de la que se pueden sacar gentes que trabajan bien con la atención y que no son garantía de flexibilidad de imagen, ni de crítica, ni de autocrítica. Podrían ser perfectamente autómatas, podrían ser reemplazados absolutamente esos ejemplares de atención precisa, podrían ser perfectamente reemplazados por computadoras. Es más, creo que las computadoras, un poquito las de la quinta generación y las que vengan, creo que van a hacer mejores descubrimientos que ellos (risas). Seguramente ellos van a ser prescindibles o en todo caso van a tener que alimentar los circuitos, echarle carbón a las computadoras (risas), en fin, esas cosas para que funcionen. ¿Con qué funcionan las computadoras? Con carbón, vapor o algo de eso, bueno, podrán ser buenos alimentadores de computadoras, esos de la atención.

Así que para qué necesitamos gente si tenemos computadoras (risas). Si entendemos a la gente simplemente como una atención definida en la dirección en la que la hemos empujado.

Así que estamos hablando de otra función importante de la conciencia que es la imaginación, y no de la imaginación en general sino de la movilidad de la imagen.

No se con qué imágenes trabajará cada cual, hay algunos que tienen un fuerte canal hacia la imagen visual, otros hacia la auditiva y así siguiendo. Hay proporciones distintas en los conjuntos humanos, un 5% se dice, trabaja fuertemente con imágenes auditivas, un 80% con imágenes visuales y así siguiendo. Bueno, sea cual fuere, necesitamos un fuerte manejo de la imagen. Una gran capacidad de conversión de la imagen. Y si ustedes tienen una gran facilidad para la conversión de imagen, movilidad de imagen, y no trabajan con atención, ustedes hacen asociación libre, delirancia (risas). Asociación libre, una cosa se encadena con otra sin dirección, sin dirección. Y sí, es un tipo muy imaginativo, fenómeno, lleno de flores. No estamos hablando de eso. No estamos hablando de imaginación libre, de libre asociación, estamos hablando del manejo de los mecanismos de la imagen. Del manejo de los mecanismos de la imagen y no de la imagen que se nos impone como pasa en el sueño. Si vamos al caso, el sueño es una delicia de movilidad de imagen. Hasta ese que fabrica la bomba, hasta ese sueña y sueña cada cosa que después..., ¡uuuyy!, ni se permite contar lo que ha soñado porque... (risas), estas cosas no son serias, son los restos animales que quedan en la sub-corteza (risas), el centro límbico está actuando.



Hubo un país, ¿pero cómo puede ser?, hace poco, hace poco, que en su cosa social demócrata extraordinaria decidió que había que modificar los planes de enseñanza, lo cual siempre está bien, hay que ver cómo. Estudiaron que había muchos niños en esa sociedad con terrores nocturnos, con líos, por los cuentos de viejas, cuentos de..., sobre todo en esos lugares donde los cuentos que se utilizan eran los de los hermanos Grimm, y bueno, que siempre hay brujas y..., muéstrame el dedito... (risas), es una cosa torturante para los niños. Ellos vieron que en los cuentos infantiles y demás había elementos que luego aparecían en muchos temores de la gente en la vida cotidiana. Y dijeron: “Acá hay un lío”, acá hay un lío con esos cuentos. Gente bien inspirada. Los sicólogos de esa sociedad social-demócrata, que quieren ayudar a la gente, a mí se me ocurre que no querrán perjudicar a la gente, ellos quieren, a su modo, todo el mundo quiere. Bueno, entonces decidieron modificar los planes de enseñanza. Y entonces, en los planes de enseñanza y en lo que explicaron a las familias y todo aquéllo, estaba presente esto de erradicar no los cuentos terroríficos y demás que, claro, ya creaban problemas, sino erradicar todo cuento infantil (risas). Son muy graciosos, es muy gracioso lo que les paso. Y entonces recomendaron a la familia y a todo el mundo, hicieron una suerte, no lo hicieron muy estruendoso porque eso ya suena a Fahrenheit, ¿no?, eso de andar quemando libros, eso no se hace; pero se guardaron los libros, hicieron una especie de caza de brujas. Pero con los libros de cuentos. Son tipos increíbles. Con los libro de cuentos, no sólo los libros terroríficos, sino los libros de cuentos en general. Porque preparaban al niño para un mundo que no existe; porque lo sacaban de la línea del eficientismo, de la línea de la modernización que querían introducir en sus estados, de la línea..., era gente que ya desde chiquitos, si le venimos con historias de que a un tipo le salen alas y luego se convierte en no se qué, y luego..., ¿ésto qué tiene que ver con el tornillo que usted tiene que apretar (risas), para que aumente la curva en un 0,28 de la producción, qué tiene que ver? Es un atentado contra el estado (risas). ¡Ah, suprimamos los libros infantiles! Cerca de 20 años les duró el rollo. Organizaron la educación infantil suprimiendo todo tipo de cuentos, tanto los terroríficos como los gratificantes, todo aquéllo. Las madres, muy disciplinaditas, tampoco, nada de cuentos, nada de historias, suprimieron esas maravillosas obras de arte de la ciencia-ficción que son los libros religiosos (risas), dioses que vienen llenos de truenos y rayos, tipos que van y suben cosas, ¡faf!, ¡squash! Síííííí, una novelita de ciencia-ficción una piojería al lado, imagínense ustedes, la Biblia, el maharata, el... ¡uuuyyy...!, ¡brillante!, ¡delirante! (risas).



Estos señores que estábamos contando, y bueno, apartaron todas esas fabulosas novelas de ciencia-ficción, también le desconfiaron a la ciencia-ficción, y eliminaron los cuentos infantiles. Y las madres, no se cómo sería, me hubiera gustado mucho escucharlo, pero, alguien hará un reporte de ésto, las madres en vez de cuentos a los niños no se qué les contarían, debe haber sido muy interesante. No se, las calorías que producen las grasas (risas). Debe haber sido algo lindísimo y absurdo (risas). 20 años estuvieron en ese rollo. Y claro, empezaron a aparecer los jóvenes de 20 años, sus ingenieros, sus..., y no se si es porque ya cambió el signo político y les fue mal a ellos políticamente, no se si fue por eso o por qué, pero dijeron: acá nadie está inventando nada, ésto es de lo último. Acá empezamos a ver una sociedad bien montadita, con sus tornillos y demás, pero todo viene de afuera, los que inventan cosas, los que generan, los que abren nuevos caminos y demás, tenemos que estar todo el día buscando cosas de afuera porque acá a nadie se le ocurre nada, no se les ocurría ni en la administración pública, ¡era un estado burocrático de lo último, cretino y cristalizado! Habla bien de ellos, de todos modos, el hecho de que se dieran cuenta. Y empezaron a abrir los cajones y empezaron a repartir todo bien... (risas). Y no se supo qué pasó, pero hubo gente inteligente, sin duda, que dijo, pero ésto es una grisura, una grisura total de la inteligencia, ¡ha sido un desastre!

Los señores pretendieron, está bien, pobres, ellos veían el lío que se producía con los terrores, los cuentos y las cosas, ¡está bien!, pero ellos pretendieron, sin advertir el problema técnico, ellos pretendieron cristalizar la imagen, fijarla en un canal, en una dirección, sin flexibilizarla, sin posibilidad de transformarla. ¡Fue una catástrofe!, desde el punto de vista de la creatividad, fue una catástrofe total que se reflejó en la producción, en el 0,28% que querían lograr (risas). Así que fail attention con esta cosa. No, no fueron franchutes. Fueron otros, pero bue... Un lío les pasó con ésto, un liazo.

1986 - LA HIPNOSIS DEL SISTEMA AFECTA A TODOS... ALLA Y ACA



Y sicológicamente hablando ha disminuido enormemente la autocrítica, la crítica, la reversibilidad. La acción del sistema es más potente a través de los medios de comunicación intermediados, es efectivamente más hipnótica, eso lo sabe cualquiera.

Y la cosa no queda ahí, porque cuando ustedes escuchan una crítica al sistema en ese sentido, cuando ustedes ven a esos que critican al sistema porque la hipnosis del sistema y demás, y lo dejan desarrollar un poco el tema, van a ver que las críticas que hacen al sistema las están haciendo además desde un punto de vista del sistema. Acá somos todos vivos o ¿qué? (risas), o, o, o...

Así que las críticas que se suelen hacer al sistema se hacen desde la ubicación, de un plano de ubicación, de un plano, que es el mismo del sistema. Es una crítica al sistema desde el mismo sistema. No es una crítica desde lo profundo del ser humano. No, no lo es. Sí, ustedes abren periódicos del sistema y se van a encontrar “se ha convertido a la gente en números”, si bueno, sí, los sociólogos van a decir..., críticas del sistema desde el punto de vista del sistema. No estamos diciendo eso.

Y esta forma de vida del momento, esta forma de vida compartimentada y demás no tiene solución. Está en desarrollo, se está profundizando y está avanzando. Y va a avanzar. Un millón de habitantes llegó a tener en su momento, un millón de habitantes en semejantes épocas, llegó a tener Roma. Hace 2000 años una ciudad de mármol que absorbía no sólo toda la economía, concentraba la administración, absorbía no sólo toda la cultura, absorbía, concentraba y monopolizaba, ¿no es cierto?, sino que absorbía también las esperanzas, las posibilidades de vida de la gente de los lugares aledaños, absorbía y concentraba y com-par-ti-men-ta-ba. Desapareció. Bueno, siempre desaparecen estas cosas (risas). Es una cosa de prestidigitadores..., uuuhhh, desaparece, bueno. Sí, claro, ésto va a desaparecer. Mientras tanto nosotros andamos dando vueltas por acá. Nada, habrá que tenerlo en cuenta y habrá que tener en cuenta que eso que hoy se ha perfeccionado mucho, no por un complot, se ha perfeccionado mucho por estos medios de difusión intermediados, que ha constituido una especie de superestructura ideológica de ablandamiento de cada persona en su cabeza, ésto que se ha perfeccionado mucho, ésto también hace mella en los nuestros. ¿Cómo no va a hacer mella? ¿De dónde vienen los nuestros, de la estratosfera, son marcianos? Los nuestros vienen del medio en que viven, de dónde van a venir. ¿De dónde venimos? Venimos de un tipo de medio. ¿Y dónde está nuestra memoria profunda? ¿Está en el Movimiento?, ¿está en el sector apoyo? ¿Pero qué estamos diciendo? Está en la tía Margarita quien nos educó. Está en todas esas cosas (risas), ahí está nuestra memoria profunda, no está en el Movimiento. A ver, un poco de sentido común. Resulta que viene alguien de la calle y se pone a trabajar con nosotros. A lo mejor entra por un organismo. Todo eso está bien. Advierte, está de acuerdo, va en contra de un sistema de valores, de un sistema de explotación social, todo aquéllo, todo eso está muy bien. Y luego, supongamos, se hace preguntas más profundas. También está bien. Y se pone a trabajar en un sector de este tipo, el sector apoyo, ¡excelente! Y resulta que ha concurrido a estas reuniones y a estos trabajos, a lo mejor una vez por semana y tiene tres meses de antigüedad, cuatro por tres doce, hay algo así como doce reuniones. Doce reuniones como de dos horas, hay algo así como un día de trabajo. Y el tiene 30 años. ¡No hay competencia posible!

El tiene 30 años de edad y bueno, ¿y de dónde viene?, del sistema con todo ese lío y esas cosas. Ustedes dirán: “si, bueno, pero en 30 años de edad no se ha chupado el dedo (risas). En 30 años de edad se habrá hecho más de una pregunta”. Claro que sí, eso es cierto, eso viene a favor, tiene su experiencia, ha comprendido muchas cosas, sino de hecho ni se hubiera acercado, algo hay en él que resuena. Si, esa es la ventaja. Pero reconozcámolo, desde su memoria más profunda está grabada, por la articulación del sistema, desde su memoria más profunda.

Y nosotros ¿qué vamos a hacer? Le vamos a decir: “despierta” (risas). No. Entonces es bueno que seamos más centrados en estas cosas y comprendamos que no sólo hacen mella en los nuestros la superestructura, la ideología del sistema, el planteo del sistema, no sólo hace mella en los nuestros por la educación anterior que han tenido, por cómo se han formado, sino porque en su vida cotidiana están en contacto con esa forma intermediada. Entonces vacilan en sus cosas, dudan de sus cosas, piensan que están equivocados o que algo no funciona en ellos, en ellos ¿mmm? Que el sistema tiene razón. ¿Cómo no va a tener razón si fabrica 1.200.000 heladeras por segundo? ¿Cómo no va a tener razón si presenta cosas prácticas inmediatas? Miren lo que les pasa a los militantes, por ejemplo, hablando de los partidos. ¡Es un espectáculo! Hay una atonía lamentable. Es fantástico lo que cuentan. Los partidos políticos que siempre se han apoyado en la fuerte militancia, particularmente los partidos de izquierda y todo aquéllo, tienen un lío serio con los militantes. No tienen forma, están como sicológicamente vencidos. Ahí confluyen muchos factores, confluyen las mismas cúpulas de los partidos que también están un poco alejándolos porque..., en fin, la cosa es compleja. Pero hay una atonía espectacular. Y la gente que ha militado fuertemente en esos partidos y demás está cada cual en los suyo. Y bueno, yo estoy en lo mío. ¿Y qué es 'en lo tuyo'? Y bueno, tengo que tener un Frigidaire, tengo que tener... Están en lo suyo, están en las cosas, porque el yo, como ustedes bien saben, el yo, no existe (risas). Pero aparte de no existir el yo, uno tiene registro del yo, ¿por qué?, por el propio nombre, si a uno le sacamos el nombre, aparte de la cédula de identidad y eso, el yo está adherido a qué, al propio cuerpo. Cambiamos las sensaciones y todo se enrarece, metemos a alguien en una cámara de silencio, le quitamos los registros perceptuales externos, le quitamos los apoyos táctiles, él tiene la sensación de que, por ejemplo, su cuerpo se agranda, su cuerpo flota, de que él se ve desde afuera, de que el yo de él no está aquí sino allí y mirá el que está ahí, y todos esos líos. ¡Ah!, entonces su yo tiene que ver con su percepción. Su yo tiene que ver con su cuerpo, su yo tiene que ver con el registro de su propia cara. Hay traumas enormes que se han producido en gentes después de una cirugía estética, por ejemplo. ¡Pero ese no soy yo! (risas). Se registra a sí mismo la gente por eso, por el registro de la percepción. Se identifica por su propio nombre, son los cohesores. Si nosotros sacáramos esos elementos se evanece todo, desaparece todo, no queda el yo, como decían los antiguos budistas. Parece que el yo es una suerte de conjunto de cosas, un agregado que forma hoy día una suerte de estructura. Ese es el yo, un agregado de cosas. Sacamos una de esas pocas cosas y desaparece el yo. No hay tal yo. Entonces imaginen ustedes el propio nombre, el propio recuerdo, el propio cuerpo, la propia ropa, el cajón ahí, con unos elastiquines, la foto de una... (risas), esas cosas. Saquen ustedes eso y desapareció el yo. Y es tan fuerte eso que cuando sacamos a ese que quiere hacer sus investigaciones y lo ponemos en otro lado, le da la sensación de que se está enrareciendo, de que está perdiendo su identidad. Y entonces, lógicamente, acá con ese lío, busca en los cajones, busca los elastiquines, busca la tía, busca la fotografía, busca... (risas). No puede perder ese yo, no puede perder ese yo.



Pero es muy complicado, no estamos diciendo que haya que perder el yo. Estamos diciendo que el yo está articulado por todas esas percepciones, por todo ese sistema, y entonces cómo no van a influir sobre nuestro yo, sobre el yo de nuestra gente, también, todos esos elementos perceptuales que vienen desde afuera. Sí, forzosamente van a influir y van a manejar la cosa desde afuera. Entonces pues, el sistema presentará las cosas de un modo, las presentará de otro, y los nuestros se sentirán debilitados. Lo que le pasa a los demás es lamentable. Pero también actúan sobre los nuestros y se sienten sicológicamente, sicológicamente fatigados, sicológicamente debilitados. Eso es de mucho interés. Como si hubieran sufrido grandes batallas y grandes heridas. Como si estuvieran profundamente equivocados, por algo que no se sabe definir qué es. Qué puede servir un minuto de autoconciencia, un minuto de autoreflexión frente a una foto llena de color, bien presentada y demás del Time o de no se qué o de lo que fuere, una linda foto... No hay competencia. Imaginen una linda botella de Coca Cola refresca, es una cosa espectacular, muy perfeccionada, muy linda, muy bien presentada y demás. Es la vida misma (risas), es la burbuja loca (risas), es la vida misma. Y cómo, yo veo una botella con líder y..., qué autoreflexión (risas). Incluso surge mi autocensura y digo, eso de la autoreflexión, eso son cosas antiguas (risas), será que los tiempos han cambiado y acá..., la burbuja loca..., están en...

Así que una cierta debilidad sicológica, no estoy hablando de debilidad mental (risas), que es otra cosa, un debilitamiento de las barreras sicológicas se produce. A lo mejor es pariente del debilitamiento mental, pero esa es otra discusión. Se va produciendo un debilitamiento de las barreras sicológicas frente a los embates pencas del sistema, a los embates mal hechos, pero bien presentados del sistema. Sí, sí, eso ustedes cuando tengan oportunidad, hay que hablar con militantes muy idealistas, como dicen ellos, del sistema, tipos que se han esforzado, tipos que han hecho cosas y demás, están en el suelo, es un lío, están debilitados sicológicamente. Y ahí sale el teórico: no, están debilitados económicamente, porque con lo que se les paga hoy..., y el que está diciendo ésto a todo eso es ejecutivo. Sicológicamente debilitados, en su lucha, en sus ideales y en sus aspiraciones, limitados, encorsetados.

Y todo eso, acción del sistema. Acción hipnótica del sistema. Conformación del yo desde el sistema a través de percepciones manejadas. Eso que les pasa a otros, también eso llega acá.

Y nosotros debemos esclarecer esas cosas entre los nuestros y fortalecerlos internamente y mostrar con qué claridad, si se lo sabe mirar, actúa la hipnosis del sistema. Debemos deshipnotizar, para empezar, a nuestra gente; luego se deshipnotizarán las sociedades. Pero debemos deshipnotizar a nuestra gente, hacerlos flexibles, flexibilizar su conciencia para que tenga reversibilidad.

Yo les digo, la fijación de imágenes es una de las condiciones de la hipnosis. Y si ustedes estudian el comportamiento mental de nuestros contemporáneos van a ver que sus imágenes están fuertemente fijadas. Eso que intuitivamente algunos como reacción han dicho: se necesita un disparo de la imaginación; eso que intuitivamente han dicho “acá falta imaginación”, lo que están diciendo es una cosa mecánica, están diciendo, claro, no tienen elementos para decirlo así, están diciendo que se necesita movilidad de imagen, movilidad de imagen. La gente está condicionada para que no haya movilidad de imagen. Es muy difícil que la gente común pueda ampliar, reducir, subir, bajar, mover, transformar la imagen. Observen ese sistema de ideación. Fijeza de imagen, condición de todo sistema de hipnosis, si no hay movilidad de imagen no puede haber cotejo y comparación. Fijeza de imagen, ésto que dicen “l'imagination au pouvoir” y todo aquéllo... Sí, todo eso fenómeno, pero acá lo que está faltando es movilidad de imagen, es un problema técnico, no es un problema poético, declamativo. La imaginación al poder. Sí, sí, eso es muy poético.



Sí, sí, la imaginación al poder. Pero, a ver, suba la imagen, baje la imagen, amplíela, ciérrela (risas), a ver. Imagine, vaya para atrás sobre baldosas blancas y negras, córrase, siéntese en un sofá, suba, transfórmese ahora, haga una experiencia guiada, no sea cascote (risas). Haga una experiencia guiada breve, como sea, ¡pero mueva la imagen!, haga lo que quiera pero mueva la imagen. Esa fijeza de imagen es la que está arruinando todo. Fijeza de imagen. Hay mucho que trabajar en esto de la movilidad de imagen. Ni estoy hablando de agilidad mental ni esos virtuosismos. Estoy hablando de un problema muy preciso que es la movilidad de imagen, base de toda posibilidad de flexibilización de la conciencia, y base de toda relativización del estímulo. Y base de toda esa hipnosis. Y condición necesaria para toda autocrítica, para toda comparación, para toda crítica. Movilidad de imagen. ¡Un temazo! ¡Un señor tema básico!, un lío. Llámenle ustedes los conductos que podemos utilizar, los canales para agilizar ésto. Llámenle ustedes experiencias guiadas, llámenle ustedes puesta en situación de lo insólito, llámenle ustedes surrealismo, llámenle ustedes como quieran, pero movilidad de imagen. Ahí...

Y a toda estas gentes que se acercan y les interesan más los trabajos internos y demás, acompañarlas en presentar opciones de flexibilidad de imagen, de movilidad de imagen, de transformación de imagen.

Está muy bien trabajar con la atención. Que atención dividida, que atención dirigida, que ésto, que lo otro; bueno, sí, está bien manejar la regulación de la atención y todo aquéllo.

Además, sin atención, ya lo sabemos, ¡nada!

No hay trabajo interno que se pueda montar, no hay trabajo que se pueda montar sino sobre la atención.

Es sobre la atención que se puede montar cualquier trabajo de desarrollo interno. De eso no cabe duda.

1986 - Surge una gran fuerza dentro de uno si uno abre las referencias y abre las comparaciones


Y bueno, para nosotros, gran importancia a la movilidad de imagen. Hay algunas técnicas que podemos desarrollar y que podemos hacer amenas estas técnicas, porque sino es un lío. Si alguien se va a poner a trabajar en estas cosas como si fuera un deber o algo así, estamos mal. Pero hay algunas técnicas que podemos hacer muy amenas, que pongan a la gente en contacto con esos mecanismos y que contribuyan a que la gente flexibilice la cosa. Eso nos va a servir, además, para todos aquéllos debilitados por la fijeza de la imagen del sistema, nos va a servir para desbloquearlos, nos va a servir para decirles: mirá cómo funciona la cosa y mirá lo que pasa en tu cabezota, y mirá como vienen los estímulos, los trenes de estímulos codificados, ¿eh?, en una dirección, como para que la gente pueda hacer sus trabajitos, ayudarse y fortificarse internamente. Surge una gran fuerza dentro de uno si uno abre las referencias y abre las comparaciones.

Cuando uno ya está en el microclima que le impone el sistema y sigue los trenes de imágenes codificados por el sistema, se registra una gran debilidad para toda nueva empresa que se quiera acometer y que no vaya en esa dirección. La gente se siente debilitada internamente, es increíble. Es muy espectacular, es muy interesante desde el punto de vista científico ese tema. La gente se siente grandemente debilitada a la hora de querer emprender un cambio, una nueva empresa en su vida. Uno puede cambiar de trabajo y todo eso pero no una gran empresa en su vida, no, como si se encontrara con un gran bloque de cemento delante.

1986 - Los problemas personales no son tan personales, sino que tienen que ver con la acción del medio en que se vive


Así es que no estamos hablando de ideologías, no estamos hablando de ideologías. Estamos hablando de lograr cohesión interna presentando nuevas opciones de mentación a la gente nuestra, nuevas posibilidades de mentación, y esas nuevas posibilidades entran por la imagen, no entran por una ideología. Nuevas posibilidades de la imagen. ¿Cómo se imagina usted el futuro? ¡Ahá! ¿Y más a futuro? ¡Ahá! Ah (risas), es que si pienso eso, me siento mal (risas). Bueno, como quiera. ¿Así que te sentís mal imaginando tu futuro?, Je, je... (risas). Esas cosas no hay que preguntárselas a la gente. ¡Esas cosas sí hay que preguntárselas a la gente! ¡Ahí está el tema! Bueno, entonces ya que tenés tanto problema, hablemos atrás. ¿Y qué tal hace 10 años?, ¿y qué pasó con ésto...? Es que me siento mal si pienso en eso (risas). ¡Ahhh! Bueno, ¿y qué tal te va ahora? Y, es que me siento mal si pienso en eso (risas). Así que para el futuro mal, para el presente mal, para el pasado mal, mejor vamos a jugar al tenis (risas).

Usted tiene que tomar, caer en cuenta, una ideología, usted tiene que tomar conciencia de no se qué. Usted tiene que tomar conciencia de usted mismo para empezar. Y si toma conciencia de usted mismo va a haber lío. Y si va a haber lío pueden pasar muchas cosas. Si usted no tiene salida, un desastre. Y si usted encuentra otra salida, el sistema va a empezar a tener problemas, porque no está equivocado usted, sino que a usted, más bien, lo han equivocado. Entonces usted podría llegar a enojarse, y muchos más podrían llegar a enojarse con el caer en cuenta.

Así que bueno, es un trabajo interesante este de dar nuevas opciones a través de la imagen y a través de ese tipo de búsquedas que tienen que ver con el propio pasado, el presente, el futuro, todos esos rollos que están planteados en nuestros materiales. Pero que tienen que ver con la flexibilidad de imagen.

¿Qué otras cosas sería de interés contemplar en nuestros trabajos aparte de los trabajos con la atención y con la imagen?

¿Qué otros trabajos pueden ayudar a dar cohesión a nuestro conjunto si es que estamos hablando de un sector apoyo de suma utilidad para el conjunto? ¿Qué otros trabajos?

Yo creo que podemos ayudar a nuestra gente más si la ponemos en contacto con un trabajo conjunto que si la ponemos simplemente en contacto con su propia problemática. Les digo, porque poner a la gente en contacto simplemente con su propia problemática los lleva más en la dirección, porque así es esta subcultura que se ha formado, lo lleva más en la dirección de lo terapéutico que en la dirección de la dinámica. Está asociado ésto de que si yo voy a desenrollar un lío interno, estoy curándome de algo, de algo que me pasa a mí, y no que es producto y es reflejo de todo un sistema mentiroso y...

Entonces, esta cuestión, es bueno saberla, y es bueno que la gente sepa que tiene problemas personales y todo aquéllo, pero que no atribuya tanto sus problemas personales a su cosa particular, sino que sepa engancharlo con lo que va pasando en el medio en el cual le toca vivir. Así que esto de hacer tomar contacto a la gente con su propio problema, ésto que la gente no quiere saber y que se escapa, eso es de interés siempre y cuando se lo ponga en contexto, siempre y cuando se lo ponga en contexto, que estos problemas existen en cada cual, así es, pero si profundizamos simplemente el problema de cada cual y ahí lo dejamos, todo trabajo en esa dirección va a sonar a terapia. Y no es la intención de que esos trabajos tengan que ver con esa terapia. La intención es destacar a la gente que esos problemas personales no son tan personales, sino que tienen que ver con la acción del medio en el cual la gente vive.

miércoles, 20 de abril de 2011

La experimentación de la ampliación de la conciencia


Al recibir la Fuerza percibirás la luz o extraños sonidos dependientes de tu particular modo de representación habitual.

En todo caso importante será la experimentación de la ampliación de la conciencia uno de cuyos indicadores deberá ser una mayor lucidez y disposición para comprender lo que ocurre.

XV. La experiencia de paz y el pasaje de la fuerza. LA MIRADA INTERNA

Pérdida y represión de la fuerza


1. Las mayores descargas de energía se producen por actos descontrolados. Estos son: la imaginación sin freno, la curiosidad sin control, la charla desmedida, la sexualidad excesiva y la percepción exagerada (el mirar, oír, gustar, etc., de manera desbordada y sin objetivo). Pero debes reconocer también que muchos proceden de ese modo porque descargan sus tensiones que de otro modo serían dolorosas. Considerando esto y viendo la función con que cumplen tales descargas convendrás conmigo en que no es razonable reprimirlas sino más bien ordenarlas.

2. En cuanto a la sexualidad debes interpretar correctamente esto: tal función no debe ser reprimida porque en este caso crea efectos mortificantes y contradicción interna. La sexualidad se orienta y concluye en su acto pero no es conveniente que siga afectando la imaginación o buscando nuevo objeto de posesión de modo obsesivo.

3. El control del sexo por una determinada “moral” social o religiosa sirvió a designios que nada tenían que ver con la evolución sino más bien con lo contrario.

4. La Fuerza (la energía de la representación de la sensación del intracuerpo), se desdobló hacia lo crepuscular en las sociedades reprimidas y allí se multiplicaron los casos de “endemoniados”, “brujos”, sacrílegos y criminales de toda laya, que gozaron con el sufrimiento y la destrucción de la vida y la belleza. En algunas tribus y civilizaciones los criminales estuvieron repartidos entre los que ajusticiaron y los ajusticiados. En otros casos se persiguió a todo lo que era ciencia y progreso porque se oponía a lo irracional, a lo crepuscular y a lo reprimido.

5. En ciertos pueblos primitivos existe aún la represión del sexo así como en otros considerados de “civilización avanzada”. Es evidente que, en unos y otros, el signo destructivo es grande aunque en los dos casos el origen de tal situación sea distinto.

6. Si me pides más explicaciones te diré que el sexo es en realidad santo y es el centro desde el cual se impulsa la vida y toda creatividad. Así como desde allí también se impulsa toda destrucción cuando su funcionamiento no está resuelto.

7. Jamás creas las mentiras de los envenenadores de la vida cuando se refieren al sexo como algo despreciable. Por el contrario en él hay belleza y no en vano está relacionado con los mejores sentimientos del amor.

8. Sé cuidadoso entonces y considéralo como una gran maravilla que debe tratarse con delicadeza sin convertirlo en fuente de contradicción o desintegración de la energía vital.

XVII. Pérdida y represión de la fuerza. LA MIRADA INTERNA

AGRADECE EN TU INTERIOR


Te expliqué anteriormente: “Cuando encuentres una gran fuerza, alegría y bondad en tu corazón, o cuando te sientas libre y sin contradicciones, inmediatamente agradece en tu interior”.

1. “Agradecer”, significa concentrar los estados de ánimo positivos asociados a una imagen, a una representación. Ese estado positivo así ligado permite que en situaciones desfavorables, por evocar una cosa, surja aquella que la acompañó en momentos anteriores. Como, además, esta “carga” mental puede estar elevada por repeticiones anteriores ella es capaz de desalojar emociones negativas que determinadas circunstancias pudieran imponer.

2. Por todo ello, desde tu interior volverá ampliado en beneficio aquello que pidieras siempre que hubieras acumulado en ti numerosos estados positivos. Y ya no necesito repetir que este mecanismo sirvió (confusamente) para “cargar afuera” objetos o personas, o bien entidades internas que se “proyectaron”, creyéndose que atenderían ruegos y pedidos.

XVIII. Acción y reacción de la fuerza. LA MIRADA INTERNA

LA REALIDAD INTERIOR


1. Repara en mis consideraciones. En ellas no habrás de intuir sino alegóricos fenómenos y paisajes del mundo externo. Pero también en ellas hay descripciones reales del mundo mental.

2. Tampoco debes creer que los “lugares” por donde pasas en tu andar, tengan algún tipo de existencia independiente. Semejante confusión hizo a menudo oscurecer profundas enseñanzas y así hasta hoy algunos creen que cielos, infiernos, ángeles, demonios, monstruos, castillos encantados, ciudades remotas y demás, tienen realidad visible para los “iluminados”. El mismo prejuicio, pero con interpretación inversa, ha hecho presa de escépticos sin sabiduría que tomaron esas cosas por simples ilusiones o alucinaciones padecidas por mentes afiebradas.

3. Debo repetir, entonces, que en todo esto debes comprender que se trata de verdaderos estados mentales, aunque simbolizados con objetos propios del mundo externo.

4. Toma en cuenta lo dicho y aprende a descubrir la verdad tras las alegorías que en ocasiones desvían a la mente, pero que en otras traducen realidades imposibles de captar sin representación.

Cuando se habló de las ciudades de los dioses adonde quisieron arribar numerosos héroes de distintos pueblos; cuando se habló de paraísos en que dioses y hombres convivían en original naturaleza transfigurada; cuando se habló de caídas y diluvios, se dijo gran verdad interior.

Luego los redentores trajeron sus mensajes y llegaron a nosotros en doble naturaleza, para restablecer aquella nostálgica unidad perdida. También entonces se dijo gran verdad interior.

Sin embargo, cuando se dijo todo aquello colocándolo fuera de la mente, se erró o se mintió.

Inversamente, el mundo externo confundido con la interna mirada obliga a ésta a recorrer nuevos caminos.

Así, hoy vuela hacia las estrellas el héroe de esta edad. Vuela a través de regiones antes ignoradas. Vuela hacia afuera de su mundo y, sin saberlo, va impulsado hasta el interno y luminoso centro.


XX. La realidad interior. LA MIRADA INTERNA

2005 - SOBRE EL AMOR, LA COMPASION Y LA BONDAD


Pregunta: ¿Podrías decir algo sobre el amor y la compasión?. En el Mensaje se habla mucho del amor y la compasión. ¿Cómo sería la actitud para llegar a ese estado de amor y compasión y para poderlo transferir a los otros?

Respuesta: Me parece que mucha gente siente la compasión. Esa compasión que siente siempre parte por una suerte de empatía con el otro, ponerse en el lugar del otro. Si no me pongo en el lugar del otro no puedo sentir el otro. No puedo tener ninguna compasión si no siento al otro. Es verbal pero no es profundo, porque la compasión es interna, tengo que sentir al otro por dentro. Yo puedo ser compasivo si experimento lo que experimenta el otro, como explica el Buda, cuando transmite compasión por determinados animales. No estamos hablando de personas, estamos hablando de algo más lejano. Al ver sus descripciones, cómo va sintiendo estos animales de adentro es una cosa espectacular, es fantástico cómo logra esa empatía con cosas tanto lejanas para uno como un perro, un gato, un tigre. Bueno, nosotros no pretendemos tanto como esas descripciones pero sí pretendemos acercarnos al otro. Si nos sentimos como él, sentimos una cosa cálida con él, una cercanía con él que nos induce a solucionar los problemas de él. La compasión lleva necesariamente a buscar las salidas de los problemas del otro exactamente como si fueran problemas míos, por lo tanto si no lo siento al otro difícilmente puedo ejercitar mi compasión. Sin duda que puedo ejercitar buenos deseos pero no logro sentir desde adentro.

Hablemos ahora del amor. Cómo puedo sentir el amor si es algo que tiene que ponerse en marcha desde adentro. ¿Desde dónde se siente el amor?, desde el corazón dicen algunos. Está bien, los egipcios lo sentían en el hígado (risas), eran los lugares donde se alojaba el alma. Bueno según las culturas, se aloja el alma en distintas vísceras (risas) por ejemplo hay algunas culturas donde el alma se aloja en el bolsillo (risas). Es una víscera muy especial.

Bueno, bromas aparte, efectivamente hay un registro interno. Diciendo algo herético debemos conceder que el amor se experimenta un poco alucinatoriamente. ¡Querida mía, tus labios de rosa, tus dientes de marfil...! Bueno, ¡las descripciones que hacen los enamorados son descripciones de monstruos! (risas) ¿Cómo tus dientes de marfil y tus labios de rosa? (risas) Bueno, pero todos sabemos lo que se está tratando de transmitir cuando se dicen estas cosas. Son cosas que van hacia la expresión poética y que a través de las palabras transmiten registros. Eso es lo que siento, amor, siento que eres una rosa, una flor. Por supuesto si alguien es muy riguroso dirá: ¿una flor?, ¿y dónde están las raíces? (risas) Pero la transmisión de registros puede ser perfecta. Con estas palabras que son metáforas, la gente lo sabe muy bien lo que tiene que decir, pero lo adecuado es que coincida con lo que experimenta.



Por eso digo que tiene elementos alucinatorios, porque quitas la representación, lo inmediato, lo visual, lo auditivo y lo reemplazas por representaciones que hacen alusión. Estamos hablando lógicamente del amor entre personas, pero el amor por todas la personas, a medida que se amplía se pierde concentración. Sentir amor por una persona, a veces, vaya y pase, a lo mejor una vez en la vida o dos, o diez, pero no todo el día, a todas las horas y en todos los momentos. Sentir amor por diez personas al mismo tiempo es un poco más complicado, pero es posible. Sentir amor por la humanidad..., bueno tal vez experimente un sentimiento muy abarcativo, muy amplio, muy interesante pero no sé si se puede hablar de amar, de sentir a la humanidad. Cuando se siente amor se siente al otro. Cuando uno siente amor por la humanidad en realidad tiene un registro amplio pero sobre todo inspirador. Ese sentimiento lo lleva a uno a distintas cosas que no son estrictamente el amor. Así que, uno experimenta el amor por lo cercano pero difícilmente lo experimenta por lo lejano que es la humanidad. Más que nada uno lo experimenta por la propia tribu, por la familia, padre, madre, a lo mejor por la gente de la localidad donde uno vive porque hay experiencias comunes, pero gentes de otros países, de otros lugares me es más difícil sentirlas y ojalá los que lo dicen lo sientan porque si no lo sienten... y hablan de esas cosas... ¡pecado! (risas).

Entonces ese amor por la humanidad que sería tan importante en este momento, ese amor por la humanidad no me parece que esté tan difundido y que se pueda experimentar realmente, pero sí me parece que se puede hacer un esfuerzo en esa dirección. Sentir en esta dirección me parece que es un gran avance. Tratar de lograr esa comunicación con lo que llamamos la humanidad me parece un gran avance, pero dar por sentado que sentimos amor por la humanidad me parece que deberíamos revisarlo. Porque estas cosas que son tan importantes y que al final terminan en una imagen del mundo hay que tratarlas con cierta delicadeza, no con slogans: ¡Yo amo la humanidad! Bueno feliz de ti que logras eso, pero bueno, ¿dónde lo sientes? ¿En el pie, en el corazón? ¿Que te da una respiración profunda? ¿Modificas la realidad, la alucinas de algún modo? ¿Sientes una poesía cuando hablas de la humanidad? Bueno, habría que hacer un trabajito con el otro, sentir al otro y a los otros. Ese salto del otro a los otros no está en nuestra cultura, está una frase, está un slogan, no está como registro. Yo puedo experimentar el amor por el otro. Pero ¿cómo hago para experimentar el amor por los otros? Yo no daría por sentado y por cerrado este negocio; está claro, sentimos amor por la humanidad (risas). Así no avanzamos. Yo tengo en claro que siento amor por otro y yo deseo profundamente sentir amor por los otros, yo trabajo internamente para expandir mi amor y para saber cómo hacer y cómo va mi trabajo tengo experiencias, tengo registros distintos, veo cómo avanzo y yo aspiro algún día a registrar ese amor por la humanidad, pero yo no lo registro y no miento ni me miento y aspiro a ese amor por la humanidad y si yo estoy en esa dirección, entonces tendré que reconocer que estoy amando a la humanidad que está en el pasado y que está también en el futuro. Es una humanidad que no veo, es una humanidad que vendrá, que vendrá. Podré hacer eso si empiezo a expandir mis sentimientos hacia los otros que están porque los veo que están presentes. Imagínate llegar a la historia de la humanidad, no hablo de datos históricos, hablo de la humanidad hoy presente que es la continuación de una humanidad que ha trabajado desde hace miles de años, cientos de miles de años. ¿Cómo puedo experimentar amor por esa humanidad? Es un proceso, siento amor por el proceso humano, algo que va cambiando, y se va transformando, no como una piedra, como algo estático, algo que tiene futuro, algo que me hace apartar todas las piedras del camino. (Los ojos del Negro se ponen brillantes y su emoción llega como una onda a toda la sala).

Pregunta: ¿Y sobre la bondad?



Respuesta: Y sobre la bondad, ¿qué podría decirte de la bondad? Que se experimenta como una reconciliación con uno mismo aunque se refiere a los otros.. Así como se experimenta el odio, lo opuesto a la reconciliación, a la bondad. El odio te lleva a una tensión tal que exige una catarsis, una tensión inaguantable, en donde no soportas al otro, donde quieres hacer desaparecer al otro. En la bondad se amplía el otro y en él te reconoces y eso te reconcilia. Y ese es un registro unitivo. El otro caso es un registro de disolución, de desintegración. Y cuando eso pasa, lo recuerdas como algo desintegrador, como algo malo que te pasó. Y cuando sucede lo otro, cuando recuerdas un acto de bondad que has producido, lo traes a la memoria y te sirve hoy. Eso es lo que tú necesitas recordar, lo bueno que has hecho, y eso es lo que te invita a hacer esas buenas cosas en el futuro. Si hubiera alma, esa alma trabajaría con fuerzas, con fuerzas que van produciendo una cierta unidad o fuerzas que se contraponen que se oponen entre sí. ¿Para que habría de continuar esa alma, para sentir siempre ese sufrimiento, esa oposición? ¡Mejor que desaparezca! (risas). Si esa alma existiera quisiéramos que esa alma fuera unitiva, que tuviera un centro hacia lo cual todo converge y todo se armoniza en ese centro. Quisiéramos que eso sí fuera creciendo. Aspiraríamos a una alma en crecimiento y no a una alma estática fija como una fotografía, viviendo en una determinada habitación, dentro un salón. Sería un alma que se amplía.

En el medioevo hablaron del alma del mundo. Un alma más allá de lo individual, de lo personal, pero que permitía que las cosas funcionaran. En los animales y en la personas, en esa época se creía que existía un alma en las personas y en los animales. Era lo que anima-ba a los anima-les. Era ese principio que le daba movimiento. Y de esa alma entendieron que en algún momento se producía un nuevo principio que ya no era simplemente el alma. Se parecía más a un soplo, a un espíritu, algo que se sentía adentro en el corazón en los pulmones, era algo como respiratorio un pneuma como los neumáticos (risas) que tienen aire adentro. Así se sentía en esa época el espíritu, como un principio distinto al alma y ese espíritu no estaba existiendo siempre, se creaba, se iba generando por lo que hacías, porque tú estabas en este mundo con tu cuerpo y hacías cosas con tu cuerpo, no solo subsistías, no solo comías cosas, cumplías con tus necesidades sino que tenías aspiraciones, tenías tendencias al futuro a ver qué tipo de cosas ibas a lograr y lo hacías con personas en un mundo de personas. Te relacionabas con las personas en un modo unitivo o de un modo contradictorio. Y cuando te relacionabas con las personas contradictoriamente también creabas contradicción en ti mismo, entonces no podías volar hacia el espíritu, no podías construirlo, te faltaba unidad. Y para obtener esta unidad necesitabas de actos de bondad. Esto creían los antiguos.

Pregunta: ¿Y qué creemos nosotros ahora?

Respuesta: Nosotros nunca sabemos bien cómo son las cosas, entonces nos esforzamos por entenderlas. Porque todo va cambiando muy rápido. La pregunta debería ser qué vamos a creer mañana y en qué vamos a creer pasado mañana, porque lo que estamos creyendo hoy no es ninguna garantía para el futuro. Y las cosas que hoy se creen o no se creen cambian, van a cambiar muy rápido. Mucha gente empezará a creer cosas que hoy no cree, que no se imagina. Mucha gente que cree que el mundo es de un modo determinado verá muy pronto cómo lo que cree cambia. Por eso lo que nosotros creemos hoy está bien, pero sobre todo en qué vía vamos, en qué dirección vamos, qué iremos a creer. Es nuestra dirección mental lo que juega en estas cosas. Iremos dando unidad a nuestra mente, a nuestras acciones, o iremos disolviendo esa unidad, aumentaremos nuestra carga de contradicciones o pondremos todo nuestro esfuerzo para direccionar hacia la vida. Eso es lo que puedo comentar según me parece. Sobre el amor, el amor a las personas, el amor a la humanidad, sobre la bondad, sobre lo que está en movimiento, sea a ese que veo o sea a todos los que veo pero que ni siquiera están acá, sino que están en un largo proceso hacia el futuro.

Bueno estamos bien. Si el amor se siente, ¡mejor! y si se siente el amor por la humanidad, aunque sea un débil afecto estamos en camino, (risas), un mínimo afecto por la humanidad, ¡cuánto se necesita esto! Pero en una persona, en otra y en otra, y en todas las personas un mínimo de afecto por la humanidad, parece que no estuviera eso hoy. Sin embargo, la historia es larga, o sea que empezará a surgir el afecto por los demás. No importa las cosas que pasen, el tema es cómo podemos apartar las piedras que hay en ese camino. ¡Eso!